La Manada visita a Rayados desde las 19.00 con la encomienda de sumar mínimo un punto para mantenerse con opciones de supervivencia en el máximo circuito.
Aunque una unidad le bastaría a Veracruz, su rival en la carrera por la preservación, para quedarse en primera. A Veracruz, con un hipotético empate de los universitarios en Monterrey, le bastaría con ganar el domingo en Toluca para firmar su permanencia y enterrar a la Manada.
Pero si Lobos empata y mañana Veracruz pincha con una igualada o una derrota, el descenso se jugará en la última fecha como hace tres años sucedió entre Leones Negros de la UdeG y el Puebla de la Franja.
La victoria del conjunto de la Benemérita en automático aseguraría dicha posibilidad; el problema es que los licántropos no ganan desde la jornada nueve cuando en teoría asestaban un golpe definitivo en la carrera por la promoción derrotando 5-0 a Veracruz en el Universitario. Pero desde aquella fecha, Lobos perdió el rumbo y los Tiburones Rojos resurgieron.
Además, los de la BUAP no ganan fuera de casa desde el torneo pasado. Por lo tanto, la empresa de imponerse en la Sultana del Norte a unos Rayados con la encomienda de asegurar su lugar en la fiesta grande, o mejorarla, luce más complicada.
EL PRESTIGIO EN JUEGO
Si la motivación falta en el cubil para encumbrar El Cerro de la Silla, Lobos o sus futbolistas deberán de pensar en la mancha que un descenso dejaría en sus currículos.
Gente con un palmarés envidiable como Francisco “Maza” Rodríguez, campeón con América o Chivas en el futbol mexicano y en Holanda con el PSV Eindhoven; tampoco eludiría su responsabilidad con la Manada tras un semestre con presentaciones cuestionables, nada acordes luego de hallar en Lobos la oportunidad de continuar con su carrera con 36 años de edad.
Los incas Luis Advíncula y Pedro Aquino, con altísimas opciones de asistir al Mundial de Rusia con Perú, también deberán de sopesar la forma en cómo se presentarán a dicha justa: si descendidos a Segunda o jugando con un club de Primera División.
Julián Quiñones, líder de goleo universitario, advirtió desde hace tres semanas sobre el malestar de cargar con un lastre como el descenso para el resto de su trayectoria.
El técnico Daniel Alcántar también se juega una carta importantísima con el objetivo de hacer carrera en los banquillos de México.
Si Alcántar salva a Lobos, nadie o pocos se acordarán sobre su presunta falta de lealtad hacia Rafael Puente.
Pero si sucede lo contrario, Alcántar se convertirá.
en el villano perfecto para culparlo sobre la situación de La Manada.