El trabajo del arbitraje genera suspicacias entre cuerpo técnico y plantel del Puebla. Los errores se acumulan y resultan muy evidentes
No es darle el “avión” a Juan Reynoso y menos ser su “palero” o el del plantel, pero el sábado cuando le cobraron a La Franja penal por una falta fuera del área de Pablo González sobre Rubens Sambueza y la posterior expulsión de Javier Salas por doble amarilla, luego de un contacto inexistente a Jorge “El Burrito” Hernández, por tercera vez en el torneo una decisión arbitral se cargó al Puebla.
El técnico peruano, sancionado el viernes por la Disciplinaria con una multa económica por sus críticas al gremio, aprendió la lección y evitó la polémica tras la derrota en el Hidalgo.
Sin embargo, aseguró su equipo presumía la intención de salir a la rueda de prensa posterior al duelo con él para exigirle a los silbantes un mejor trabajo.
“Muy molestos, frustrados (por la derrota), hoy era para tenerlos a todos aquí para explotar y hacer sentir nuestra bronca, nuestra frustración. Pero en el afán de proteger a todos, sobre todo al club, no hemos permitido que vinieran porque iba a ser una ‘carnicería’ en cuanto a declaraciones (contra los colegiados)”, dijo Reynoso el sábado.
Quien no se cortó en la zona mixta del estadio Hidalgo fue Osvaldo Martínez. El paraguayo le mandó un recado a Arturo Brizio, presidente de la Comisión de Árbitros, exhortándolo a trabajar con los árbitros, pues cada semana sus nazarenos “perjudican” al Puebla.
“Le pido al señor Brizio que hable menos o lo haga con sus árbitros, pues cada semana pasa algo y nos perjudica, eso nos deja molestos. Sí, hay que mejorar en la cancha, pero ellos (los silbantes) también”, indicó el mediocampista en declaraciones recogidas por la cadena TUDN.
LOS YERROS CONTRA LA ESCUADRA BLANQUIAZUL
El Puebla ya pagó en la jornada tres los errores del central Juan Andrés Esquivel, cuando éste no sancionó una mano dentro del área de Clifford Aboagye, y ni siquiera recurrió al videoarbitraje (VAR) para despejar dudas o evitar polémicas.
En la repetición de televisión, se observó a Clifford contactando la pelota tras un rebote con la extremidad superior izquierda. De acuerdo a la nueva reglamentación FIFA, todo contacto con la mano dentro del área se debe de sancionar con la pena máxima.
Pero de eso nada en aquel partido.
Luego está el aparente gol de cabeza de Jesús Zavala ante el América. Sí, aquel remate con la testa sacado por Guillermo Ochoa a la usanza de la salvada hecha ante Brasil en el Mundial de 2014.
La repetición en el Cuauhtémoc mostró la pelota no cruzó del todo la línea de gol; aunque en otras tomas o ángulos parecía sí lo había hecho.
En ese mismo cotejo, Reynoso reclamó expulsión para Víctor Aguilera tras una entrada sobre Christian Tabó en el primer tiempo. No obstante, en el VAR se juzgó cómo Aguilera le sacó el esférico limpiamente al capitán blanquiazul.
Aunque estas marcaciones, y las del sábado, alimentan la polémica como para pensar en si de verdad hay una persecución contra el Puebla por las declaraciones de su técnico Juan Reynoso, y si habrá repercusiones tras lo dicho por Osvaldo Martínez el sábado tras la derrota contra Pachuca.
