Un cierre carretero en el Arco Norte tiene varado al autobús de los Pericos de Puebla, donde se trasladan la mayoría de los jugadores del cuadro titular que salieron desde la noche del domingo de Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde jugaron la primera serie de la segunda vuelta.
Más de cinco horas tienen los elementos verdes a la espera de que se reabra la circulación para llegar a Puebla y poder estar listos para abrir serie el martes contra Nuevo Laredo en el Hermanos Serdán.
En una foto que subió en su twitter el lanzador Edwin Salas aparece al lado de Carlos Alberto Gastélum, Alberto Carreón y el cronista Miguel Ángel Byrd, entre otros.
“No estamos desesperados, estamos disfrutando de la naturaleza”, relata el “Satanás”.
A pesar de los esfuerzos que ha hecho la directiva para acelerar su llegada es imposible poder arreglar este tipo de imprevistos.
Lo malo de todo es que los jugadores llevan horas sin consumir alimentos y en la zona del cierre en el Arco Norte es imposible conseguir alimentos.
“Nuestro temor es que llegue la gente mala y quiera asaltarnos”, expresó uno de los elementos verdes.