Plaza de toros El Relicario, un tercio de entrada, clima agradable y buen ambiente en los tendidos. Toros de José Arroyo, uno de Real de Saltillo y uno de regalo de Cuatro Caminos. Dos orejas Federico Pizarro y una de Arturo Soto.
ARTURO SOTO
Soñador con 540 kilos número 424 de José Arroyo para el nuevo matador Arturo Soto. Berrendo aparejado, delantero de cornamenta abanto de salida. Con el que Arturo lo consintió de capa, lo bregó para hacerse de él y luego Verónicas acompasado. El toro mostró movilidad y fijeza, emotivo. Lo cuidó en el caballo y después regaló ramillete de chicuelinas. Después de la ceremonia del doctorado, brindó al apoderado Pepito Arroyo. Con la muleta estuvo firme. Ante un ejemplar que al que llevó muy templado, con cadencia. Las tandas de mayor calado llegaron por la diestra pero por ambos lados dejó paisajes de profundidad. El de Arroyo tuvo tendencia a tablas pero Soto realizó su faena siempre en los medios. Pinchazo, maroma espeluznante y estocada para tener salida al tercio.
El cierra plaza se llamó Caporal para el nuevo matador Arturo Soto. Ejemplar de José Arroyo con el que estuvo muy esforzado. Ante el deseo del triunfo y la falta de materia prima, decidió regalar un toro.
TORO DE REGALO
Arturo recibió a Intruso de Cuatro Caminos con 475 kilos número 164. Con este toro Arturo Soto estuvo con mucha disposición, entregado y pudo expresarse más. Con muletazos que calaron en el tendido. Espadazo entero para facturar una oreja.
FEDERICO PIZARRO
Recibió a Palomo Fifí con 505 kilos número 411 cárdeno que de salida no logró acomodarse el torero con la capa sin embargo, después del puyazo de Omar Morales, el toro se prestó para quite por Navarras. Después de la devolución de trastos del nuevo matador, Federico en los medios comenzó una faena por la diestra, con muleta cuadrada y sin permitirse errores. Un ejemplar que exigió de principio a fin. Estocada y descabello para escuchar ovación en el tercio.
Su segundo, el de la despedida de nombre Hidalguense con 540 kilos, número 427 el matador ha estado inspirado ante un ejemplar De José Arroyo que tuvo calidad. Pizarro logró una faena variada y completa principalmente por el lado derecho cerca de la puerta de cuadrillas. Estocada entera y el toro rodó sin puntilla para facturar dos orejas y así despedirse entre el clamor del público poblano, las notas de las golondrinas y los gritos de torero… torero.
HÉCTOR GABRIEL
Repitió el triunfador de la corrida pasada, recibió a Compadre con 505 kilos número 418, ejemplar que de salida tuvo tendencia a querencia. Brega inteligente con la capa a un toro incierto que incluso se tercia.
Destaca en las banderillas Gerardo Angelino para salir al tercio.
Con la muleta, después de brindar al CP Rafael Moreno Valle Sánchez, Héctor ha estado con voluntad a raudales. Jugando se la piel ante un toro complicado, que se tercia y exige. Mérito del torero sin duda fue ponerse en el sitio donde había que robar muletazos con un riesgo inminente. De valor firme y sereno. Espadazo y descabello. Escuchó dos avisos y palmas.
Su segundo toro de la tarde se llamó Amigo con 540 kilos número 9 de Real de Saltillo. Ejemplar negro vuelto de pitones que salió con trote y recorrido. Héctor lo recibió con larga cambiada pegado a tablas. Y templado con Verónicas. Con la muleta, ha estado superior ante un toro que no fue fácil y exigió en todo momento sitio y firmeza. El toro tuvo momentos de calidad y recorrido que transmitieron. Héctor pegó tandas de altos vuelos, conectó nuevamente con el tendido y al son de “qué chula es Puebla” hilvanó tandas de mucha profundidad. Héctor mostró su mente clara y facultades. Tardó en caer el ejemplar por lo que se ordenó un aviso para el torero y arrastre lento para el de Real de Saltillo. Mientras que el matador poblano escuchó palmas en el tercio.