Si un deporte tiene rentabilidad a nivel mundial ese es el futbol.
Y si una economía necesita un punto de lanzamiento para continuar su reactivación, no hay nada mejor que el turismo deportivo.
La apuesta de Eduardo Rivera para reactivar la economía poblana es clara, y traer la sede del Mundial de Futbol 7 tanto en la rama femenil como varonil en 2023, es la mejor manera de lograrlo.
Un Mundial de Futbol 7 que tendrá la representación de al menos 32 selecciones en ambas ramas, y que representará para Puebla una gran derrama económica, ya que para ese mes de agosto de 2023 -las fechas aún no se definen- se espera la presencia de 200 mil visitantes, tanto del interior de la República como del extranjero.
Cientos de millones de pesos se esperan ingresen a Puebla durante la realización del certamen en 2023, tanto en la industria hotelera, restaurantera y turismo.
“Será un honor ver a nuestra selección competir con los mejores del mundo, y ojalá ganando la Copa”, dijo Toño Iriarte, titular del deporte municipal.
“La idea es construir 150 canchas, gimnasios al aire libre y a darle a los poblanos una ciudad de 10”, externó el hombre que visualizó traer a Puebla un evento de talla mundial y que recibió todo el apoyo de su presidente municipal.
Un presidente municipal que sabe que en estos momentos complicados la mejor manera de traer derrama económica a la ciudad es haciendo cosas grandes, y el Mundial de Futbol 7 es el evento ideal para conseguir parte de lo prometido: deporte, seguridad, y muchas cosas más.