Entre la razón y el corazón. Rafael Puente entiende su cese como técnico de La Manada, pero no lo comparte.

A su entender, Lobos, aún con él en el timón gozaba de argumentos para salvarse a pesar del pobre desempeño del equipo desde hace cuatro jornadas; sin embargo, respetó la decisión de la directiva universitaria y deseó éxito al equipo para concretar la meta.

“A mi entender creo que teníamos argumentos para conservar la categoría, lo sigo pensando, porque se trata de un grupo extraordinario de futbolistas; pero la decisión se tomó, la respeto, aunque no la comparto y sí la entiendo”, apuntó a la cadena ESPN.

La noticia, además, lo sorprendió; aunque ya se sacude el polvo por la caída y alista su próximo proyecto, el cual confía le llegará antes de lo previsto tras lo hecho con Lobos en casi año y medio de trabajo, donde consiguió el ascenso a la máxima categoría y pelea por mantener al equipo en Primera.

“A partir de ayer me sacudí el polvo de la caída, por supuesto que es dolorosa, pero la encaro de frente y seguiré mi capacitación para el nuevo proyecto, que espero vendrá, para ser un mejor entrenador y una mejor persona”, explicó.

Puente dejó a La Manada en el fondo de la tabla general con nueve puntos y penúltima entre los cocientes.

El conjunto universitario dilapidó en el presente torneo una ventaja de 23 unidades en la carrera por la salvación; además del juego directo contra los Tiburones Rojos del Veracruz, quienes les pisan ya los talones en la porcentual.

Aunque La Manada sigue por encima de los escualos en la lucha por mantenerse en Primera y necesitada de seis puntos de los próximos 12 en juego, pues con media docena forzaría a los jarochos a sumar 15.

En el cerrojazo de la competencia, Lobos encarará a Cruz Azul, Necaxa, Rayados y Puebla. A los cementeros y regios los visitará; a los hidrocálidos y blanquiazules los recibirá en el Universitario de la BUAP.

Veracruz, a su vez, se enfrentará a las Chivas, León, Toluca y cruz Azul. Los escualos hilvanan par de victorias, pero en la próxima jornada chocarán contra el Rebaño Sagrado, a quien no se meriendan desde hace tres años.