Quiñones de regreso, ya apareció en el entrenamiento de Lobos

Redacción

  · miércoles 4 de octubre de 2017

Los Lobos de la BUAP esperan que Julián Quiñones, su goleadorcolombiano, haya aprendido la lección.

Después de ser separado del plantel el pasado 18 de septiembre,un día antes del temblor, por “no cumplir con el perfil queexige la institución”, el colombiano que suma seis goles en elactual torneo, apareció en el entrenamiento de ayer celebrado enuna zona de la Isla de Angelópolis, donde se le observa felizrealizando saltos, al lado de sus compañeros.

Quiñones estuvo separado 20 días después de caer en un actode indisciplina que no aclaró la directiva.

En ese lapso estuvo entrenando con el equipo Sub-20, y apenas elsábado en el duelo contra León se le vio sonriente, entrando a lacancha ataviado en jeans y playera, y muy sonriente.

Ya sabía que su regreso al primer equipo estaba cerca.

En la ausencia de Quiñones, los Lobos sumaron seis de los nuevepuntos posibles, y Amaury Escoto quien cubrió su lugar, anotó dosgoles, que significaron los seis puntos, el segundo de ellos conuna espectacular chilena contra Chivas.

Pero además del buen comportamiento de Quiñones, Rafa Puentese dio cuenta que le hace falta en el campo, con su rapidez, suszancadas fugaces para cerrar y buscar el marco enemigo.

Rafa Puente ya se dio cuenta que Quiñones y Escoto pueden haceruna pareja perfecta en el equipo.

A inicios de agosto, el futbolista estuvo involucrado en unapelea junto a su excompañero William Palacios, quien fue dado debaja en ese momento, mientras que Quiñones recibió unasanción.

Semanas después, el máximo goleador de los Lobos fue anunciadocomo baja por tiempo indefinido a raíz de su ausencia en lasterapias de rehabilitación.

Este martes, Julián Quiñones regresó a los entrenamientos conel primer equipo y deberá aprovechar el paro de Fecha FIFA paraprepararse de cara a la recta final del torneo, donde lo primordialpara el equipo es hacer los puntos necesarios para estar lo másarriba en la tabla del descenso.

Ahora sí, borrón y cuenta nueva, y ojalá Quiñones no vuelvaa caer en tentaciones.