En el cubil la relación laboral con el mediocampista JonathanFabbro se suspendió, luego de darse a conocer su búsqueda porInterpol tras la acusación que pesa sobre él en Argentina deabusar sexualmente de una menor.
Al futbolista se le dio así un período de gracia “a fin deresolver su situación jurídica”. Por lo que Lobos cuenta aúncon el argentino.
Lo anterior lo anunció el club por medio de un escuetocomunicado difundido a través de redes sociales, el cual llegódespués de las 17.00 horas del lunes y tras ser sorprendidos porla información de la nueva situación legal de Fabbro, quienademás no apareció en la vuelta a los deberes a CiudadUniversitaria.
El movimiento de La Manada obedece a la lógica cuando la LigaMX a través del capítulo 3 de su reglamento de afiliación seguarda el derecho de admisión de elementos envueltos en líoslegales, al indicar: “No ser parte ni haber participado ennegocios de dudosa reputación o en conductas delictivas”.
UNA RAYA MÁS AL LOBO
El embrollo de Fabbro se trata de un nuevo capítulo de losdilemas extra cancha de La Manada, los cuales arrancaron con lapelea entre William Palacios y Julián Quiñones en agosto pasado,la cual le costó la separación del equipo al primero.
Después continuaron con la exclusión de Luis Quiñones deLobos por “no reflejar los valores de la institución” y mástarde se agudizaron con la separación temporal del goleadorJulián Quiñones como para hacerlo entrar en razón.
Todo esto sin mencionar del bochornoso incidente en Veracruz,cuando la escuadra encaró el partido con los uniformes de localcuando visitaba a los Tiburones Rojos; o del apagón en elUniversitario de la BUAP en pleno enfrentamiento contra los Xolosde Tijuana.