César Tapia no pierde el tiempo para nada. Se levanta muy temprano, corre en un pequeño parque que está dentro del fraccionamiento donde tiene su casa por espacio de 15 o 20 minutos y regresa para continuar con sus trabajos de gimnasio dentro de su hogar.
Para el histórico receptor de los Pericos la situación que se vive con el Covid 19 es complicada, "pero hay que respetar lo que dicen las autoridades sanitarias y mantenerse en casa. No sabemos a qué nos enfrentamos, y esperar a ver qué decisión se toma al respeto".
Pero también sabe que hay que estar en forma para cuando se dé luz verde y tenga que regresar al campo de entrenamiento de los Pericos de Puebla, para comenzar la temporada 2020 de la Liga Mexicana.
"Este es nuestro trabajo y debemos estar preparados. A nosotros nos afecta este paro, como a todos, pero sí nosotros no jugamos, no cobramos. Nos golpea muy duro en la económico, porque la mayoría que nos dedicamos al beisbol no tenemos otro ingreso.
"En nuestro contrato dice que empezaremos a devengar nuestro salario cuando empiece la actividad de la temporada, así que ya te imaginarás como estamos todos, a la expectativa de que diga la dirigencia de la Liga Mexicana.
"Ya viste que primero se dio una fecha y ahora la contingencia se extendió hasta el 30 de mayo, pero hay que obedecer por seguridad de todos".
César se encuentra en Aguascalientes, donde todavía no existen tantos casos. Llegó allá, un día después de que las autoridades sanitarias dieron la orden de suspender actividades deportivas en la segunda semana de marzo.
"Apenas había adquirido el departamento. Mi familia viajaría esa semana para alcanzarme en Puebla y quien los alcancé fui yo. Aquí estoy bien resguardado con mi esposa y mi pequeño de dos años y medio. Es decir por condición no me preocupo, porque parece que son cuatro niños", agrega sonriente el nativo de Empalme, Sonora, que regresa en este 2020 con Pericos.
"Al mediodía me salgo un rato a lanzar bolas con dos amigos míos, Eder Llamas y su hermano que son originarios de Aguascalientes. Tiramos un rato para aflojar el brazo y nos retiramos. Eso sí, guardando la sana distancia y con la higiene que se recomienda en el lavado de manos", dice Tapia que sabe que lo único que comparte con ellos es agarrar la misma pelota.
"Es lo bueno del beisbol, que no es un deporte de contacto y podemos practicar un poco".
César reconoce que todo lo que se vive cambiará la vida de muchos y confiesa tener fe de que la temporada 2020 se salvará. "No sabemos cuándo, pero sé que habrá buenas noticias para jugar".
Acepta que ya con las cuatro semanas de trabajo que llevaban, como profesionales depende del jugador estar en forma y listo para jugar.
"Pienso que con lo que ya traemos, con dos semanas más de trabajo y unos cuatro o cinco juegos de preparación, estaremos listos para entrar en acción.
"Lo que la afición de Puebla debe saber es que cuando se reanude la temporada queremos brindarles un buen espectáculo, que los Pericos sean de los punteros y esté peleando por el campeonato.
"Y en la situación que se vive, tómenlo en serio, respeten las indicaciones santitarias, sana distancia y quedarse en casa para salir pronto adelante".