Sin la fama o cartel de LeBron James, pero con la humildad dejugar con los pies descalzos en plazas como Alemania, Argentina yEstados Unidos los Triquis de Oaxaca causaron furor en Puebla.
El equipo infantil de basquetbol, que saltó a la fama en 2013por la "singularidad" de jugar sin zapatos deportivos y ganar asícampeonatos, trajo su magia al estado como parte de una invitaciónhecha por los Halcones de la Universidad Interamericana paradisputar una serie de encuentros amistosos en Cholula y laInter.
Y los Triquis trajeron carro completo: tres categorías(infantil, pasarela y la estelar sub13) como para dejar claro queno se trata de "garbanzos de libra", y que hay detrás de ellostodo un trabajo para seguir cosechando éxitos a nivel estatal,nacional e internacional.
Así quedó claro en los primeros dos duelos contra Puebla,entidad que además de distinguirse por su catedral, pueblosmágicos y comida típica, también lo hace por su basquetbol ysino...preguntarle a Gustavo “El Titán” Ayón, quien se formóaquí para salir a deslumbrar a las pistas de la NBA y la ACB deEspaña, donde se coronó bicampeón esta semana con el Real Madridde Baloncesto.
Por lo que con el duelo pintado ambos estados dividieron honoresen los primeros dos enfrentamientos: la infantil angelopolitanasucumbió 38-17 con Oaxaca; Puebla arregló cuentas con lacategoría pasarela 38-24 para forzar la definición en el duelosub13 ante la Unidad Tlachi de San Pedro Cholula repleta defanáticos.
Y en el “bueno”, los Halcones fueron más llevándose todoel botín 49-25.
A BENEFICIO
Los duelos en Cholula fueron a beneficio del cuerpo de bomberosde dicho municipio. Hoy ambas escuadras se reencontrarán en elgimnasio de la Universidad Interamericana desde las 16:00, en loque será el cierre de la actividad.
[caption id="attachment_23934" align="aligncenter" width="600"]El basquetbol infantil del estado estuvo de plácemes con la visitade los Triquis. Foto: Sandro Franco.[/caption]
Admirados
Aunque cueste creerlo algunos ni conocían a los Triquis, peroacuedieron ayer a la Unidad Tlachi de San Pedro Cholula paraconstatar lo que "más o menos" habían averiguado de ellos: sucapacidad de jugar al basquet sin zapatos deportivos; es decir,descalzos.
Otros sabían del fenómeno y se acercaron a rendirles tributo,reconocerlos pidiéndoles el autógrafo o la foto del recuerdo comosi se la pidiesen al mismísimo LeBron James, estrella de losCavaliers de Cleveland y jugador más valioso de las finales de laNBA.
"No había escuchado hablar de ellos y más o menos meplaticaron. Pero tras verlos jugar me pareció increíble lo quehacen: descalzos corriendo y encestando, por lo que ahora tienentoda mi admiración", aseguró Maritza Stefanoni, fanática.
"Son un orgullo para su comunidad, para México: la muestra deque cuando se tienen ganas, todo es posible", compartió RafaelCapilla, seguidor del basquetbol.
Preparan a la nueva sangre
De "garbanzos de libra" nada. Si los Triquis vinieron a Pueblaya con su sexta generación, es por el trabajo diario de niños yentrenadores.
Pues parecía increíble que la categoría estelar de lacomunidad oaxaqueña fuera superada con cierta facilidad por Pueblaen el último duelo del primer día de actividades entre ambosconjuntos, y no porque se desconfíe del nivel del baloncesto delestado, sino por el cartel que presume el bando contrario.
Algunos de los fanáticos en la grada de la Unidad Tlachi de SanPedro Cholula llegaron a dudar del talento de los niños descalzos,"¿A poco a los que les estamos ganando son los Triquis…?".
Y sí, tal vez no como el producto acabado que logró honoreshace tres años en Estados Unidos o Argentina, pero sí en plenaformación.
Pues los chicos de dichas proezas están todos en la Ciudad deMéxico preparando un torneo en Barcelona y Orlando, EstadosUnidos.
Por lo que los niños oaxaqueños que hoy se despedirán dePuebla forman parte de una nueva camada que se foguea al calor dela revolución, con el objetivo de seguir la tradición de supueblo y ser mañana profesionistas, buenos ciudadanos y ejemplospara México como manifestó su entrenador Sebastián Ortiz.
"Esta ya es la sexta generación de niños de la comunidad quejuegan al basquetbol. Son ya otra semilla que sembramos", señalóel coach.
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El “cross over”, una movida de jugador profesional. Foto:Sandro Franco.[/caption]