El precio de un sueño: Wendy Reyes, la halterista poblana que vive 24/7 para triunfar

La halterista refleja el camino marcado por retos económicos y la constante presión de obtener resultados que viven los atletas de alto rendimiento

Katia Fernández / El Sol de Puebla

  · jueves 21 de noviembre de 2024

La historia de Wendy Reyes es ejemplo de lo difícil que es ser un deportista en México. Foto: Katia Fernández / El Sol de Puebla

Perseguir los sueños suele significar un sacrificio constante en diferentes aspectos de la vida y los deportistas de alto rendimiento son un ejemplo de ese proceso; algunos se mudan a otros estados o países y dedican la mayor parte de su día a la disciplina que practican volviéndose atletas 24/7.

Pero, ¿qué implica ser un deportista 24/7? Para la halterista Wendy Reyes Mavil significó dejar atrás Veracruz y convertirse en representante de Puebla a nivel nacional como atleta juvenil, aventurándose sola en una ciudad desconocida y lejos de su familia.

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Desde los 16 años, la atleta de halterofilia comenzó a vivir en el Instituto Poblano del Deporte (INPODE) sin conocer a nadie, dedicándose solamente a entrenar y estudiar la preparatoria, comunicándose con sus papás a través de llamadas nocturnas.

“Me ofrecieron estar aquí con hospedaje, alimentación y el gimnasio, así que dije ‘ese es el sueño de todo atleta, vivir en una Villa Deportiva y estar 24/7 concentrado en su deporte’, así que eso fue lo que me motivó para llegar a Puebla”, confesó en entrevista.

Wendy Reyes es atleta 24/7 desde el 2017. Foto: Katia Fernández / El Sol de Puebla

Sin embargo, no todo fue sencillo, pues cuando recién llegó a la villa la alimentación que le otorgó el INPODE sólo cubría a Wendy de lunes a viernes, así que los fines de semana debía hacer rendir los 300 pesos que su mamá le enviaba desde Veracruz para comer por lo menos dos veces al día y tratar de guardar lo que sobrara para sus gastos personales y escolares.

Las cosas se estabilizaron casi un año después de su llegada hasta que Reyes Mavil ganó sus primeras medallas en 2018 y el INPODE comenzó a darle una beca de cuatro mil 500 pesos que no ha sido constante gracias a los cambios administrativos que se han presentado en el organismo.

“Cuando llegó la administración de 2019 me bajo a mil 500 pesos, y pues ahí yo me arreglé con la directora y me la subió a tres mil mensuales; después, en este año, bajó a 900 y estuve así cinco meses hasta que llegó el nuevo director (Luis Mauricio Suárez), que me la subió a dos mil mensuales”, relató Wendy a El Sol de Puebla.

Ellos son los galardonados del Premio Estaral del Deporte 2024. Ilustración: Alejandro Ramos / El Sol de Puebla

La cifra resulta corta a las más de ocho horas que la halterista dedica a sus entrenamientos, pues dependiendo de la planeación deportiva de su entrenador, Reyes Mavil suele tener doble sesión enfocada en aumentar el peso que carga, su masa muscular y la técnica que utiliza para levantar las pesas.

De lunes a sábado Wendy Reyes divide su tiempo entre los entrenamientos y las actividades deportivas, mientras que los domingos los dedica a hacer tarea, ya que además de ser una atleta destacada en su disciplina, también cursa el séptimo semestre de la licenciatura en derecho en la Universidad Autónoma de Veracruz a distancia, manteniendo un promedio de 9.7.

Sin embargo, la respuesta del INPODE no ha sido igual de efectiva, pues además de que recientemente le negaron el apoyo para una competencia que pudo catapultarla como seleccionada nacional, el instituto también le debe la beca de octubre, noviembre y diciembre (con lo que cerraría la administración actual), así como el pago por la medalla que consiguió en los Juegos Nacionales CONADE 2024 que son siete mil 500 pesos.

La atleta apunta alto soñando en Los Ángeles 2028. Foto: Katia Fernández / El Sol de Puebla

Entre los desafíos económicos, físicos, familiares y escolares, la vida como deportista 24/7 también resulta solitaria pues se condiciona a los resultados que logran: si no obtienen medallas pierden el derecho a vivir en la Villa Deportiva y, por el momento, Wendy es la única que ha mantenido ese beneficio después de siete años.

Su motivación de llegar a ser una representante nacional en competencias como el Panamericano de halterofilia que se vivirá en el 2025 o la clasificación a Los Ángeles 2028 son parte de la motivación que permiten a Wendy Reyes seguir esforzándose a diario por continuar como una atleta 24/7, encontrando acompañamiento del grupo multidisciplinario que a diario cuidan de su salud, alimentación y sus entrenamientos.

Ser un atleta 24/7 en México significa mantenerse en forma para la alta competencia, pelear por los apoyos prometidos y administrarlos sabiamente pensando en que el próximo mes podrían disminuir o desaparecer. Esa es la realidad del atleta en territorio azteca que se refleja en la historia de Wendy Reyes.

  • 2022 Fue el año que Wendy Reyes conquistó la medalla de oro que le ayudó a entender todo el sacrificio que ha realizado
  • Wendy Reyes se adentró a la halterofilia cuando tenía 11 años después de probar otros deportes