Bad Bunny provocó una gran cantidad de caos y mucha expectación en sus conciertos en México, principalmente en la primera de sus fechas cuando los boletos de Ticketmaster presentaron varios fallos, lo que dejó a un gran número de fans fuera del evento, incluida una quinceañera.
Como muchas personas, una joven decidió pedir como regalo el boleto para el esperado concierto del puertorriqueño, pero las cosas no resultaron como esperaba.
La situación ocurrida en la primera fecha de Bad Bunny provocó que se presentaran más de mil 600 denuncias ante Profeco por las fallas con su sistema, boletaje clonado y en el código.
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Quinceañera y sus problemas con Bad Bunny
En la primera fecha del concierto el pasado 9 de diciembre, una madre de familia fue entrevistada como parte de las personas afectadas que vieron como sus boletos, a pesar de ser comprados en el sistema oficial de Ticketmaster, no eran válidos y no pudieron entrar al momento de llegar a las puertas del Estadio Azteca.
De acuerdo con la mamá, el boleto era para su hija, quien la convenció de no tener fiesta de quince años a cambio de las entradas para Bad Bunny.
“Mi hija cumplió quince años y fue su regalo, no hubo fiesta por venir”, comentó la madre a las afueras del Estadio Azteca.
La señora indicó que no solo fue la compra de los boletos de su hija, también adquirió algunos para sus mejores amigas para que pudiera realizar el festejo con ellas, quienes tampoco pudiera ingresar.
De esta forma, la inversión para asistir al evento fue más que grande, solo para terminar en medio de grandes filas junto a miles de personas en la misma situación y que tuvieron que escuchar el concierto desde afuera del inmueble.
Los boletos para cada una de las fechas tuvieron precios desde los 660 pesos hasta los 9,150 pesos, mientras que los afectados, principalmente, realizaron su compra por medio de las preventas exclusivas de tarjetas bancarias.
Profeco y su intervención a Ticketmaster
Después de los problemas, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) tuvo que intervenir para el segundo concierto y, posteriormente anunció las condiciones que deberá de cumplir con las personas que resultaron afectadas.
Al respecto, Profeco destacó que Ticketmaster tendrá que reembolsar el costo total de las entradas a quienes las hayan adquirido en alguno de los canales oficiales. Junto a esto, los consumidores tendrán derecho a una compensación no menor al 20 por ciento del precio pagado.
Ricardo Sheffield, procurador del consumidor, también anunció que exigió un informe a Ticketmaster sobre los problemas ocurridos con los boletos de Bad Bunny.