Desde hace ya varios días el volcán Popocatépetl incrementó su actividad de manera considerable, cubriendo de ceniza a varios estados de le república, incluido Puebla, por lo que los reflectores tanto nacionales como internacionales se han centrado en el coloso atentos del avance en la actividad del mismo en caso de que esta se eleve aún más que los últimos días.

Pero hablar de Don Goyo también implica el prestar atención a su eterna compañera, “La mujer dormida”, cuyo nombre oficial es el Iztaccíhuatl, misma estructura que figura dentro de la lista de los volcanes sísmicamente activos de México e incluso es considerada como la tercera montaña más alta del país tan sólo después del Pico de Orizaba y de su compañero, pero, ¿podría hacer erupción?

¿Podría tener actividad el Iztaccíhuatl?

Pero esta pregunta no es reciente, pues incluso en el mes de octubre del año 2019 Robin Campion, doctor en Ciencias Geológicas e investigador del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) compartió a través de la gaceta de esta institución que la estructura se ha mantenido en reposo desde hace 10 mil años, sin mostrar ninguna señal de actividad.

De acuerdo con el investigador el estatus en el que se encuentra es el de reposo prolongado, pese a que se trata un volcán potencialmente activo, esto debido a que no ha presentado ninguna señal de preparación de actividad, los cuales suelen suceder con años de anticipación y los registros sísmicos que se tienen se encuentran ligados a la actividad del Popocatépetl.

Aunque esto no es nuevo, pues los expertos afirman que en el país se han identificado más de 2 mil volcanes, 48 activos o potencialmente activos, y aproximadamente 60 por ciento de la población vive sobre suelos que recibieron en el pasado los efectos de los volcanes debido a que se trata de terrenos ampliamente fértiles debido a la conformación de estas estructuras.

¿Qué sucedería en caso de que despertara el Iztaccíhuatl?

Según puntualizó el especialista, en caso de que hubiera una nueva inyección magmática en “La mujer dormida”, esto sería antecedido por un aumento en las señales de sismicidad, además de que comenzaría a presentar fumarolas y deformaciones en el suelo, además de incluso presentar modificaciones en la temperatura, pues el magma tendría que fracturar la roca para subir.

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En caso de suceder lo anterior, la actividad sería similar a la de "Don Goyo", con fumarolas que podrían provocar la caída de ceniza tanto en la Ciudad de México como en Puebla, para lo cual las autoridades de los distintos órdenes de gobierno cuentan con un plan de reacción, tal es el caso del Plan D-N-III que se pone en marcha por parte de elementos de las Fuerzas Armadas.

Finalmente, dentro de las zonas de riesgo en caso de un nivel alto, este se contempla a 15 kilómetros de su centro mientras lo que no implicaría un problema, pues tan sólo algunas alcaldías de la Ciudad de México como Milpa Alta se ubican en un radio de 60 a 90 kilómetros del volcán y sólo la caída de ceniza resultaría perjudicial tal y como está sucediendo actualmente.