KATHERINE COLEMAN GOBLE JOHNSON
Nació en Virginia Occidental, Estados Unidos, en 1918. Fue pionera, como mujer y como afroamericana en estudiar en la universidad. Se graduó Summa Cum Laude en 1937 en matemáticas y francés por la Universidad Estatal de Virginia Occidental.
En 1953 entró al Departamento de Guía y Navegación de la NACA, National Advisory Committee for Aeronautics, que en 1958 se convirtió en NASA, National Aeronauticas and Space Administration. Fue de las primeras en utilizar computadoras digitales. Junto a su equipo de mujeres afroamericanas, calcularon las trayectorias de las misiones Mercury, las primeras misiones tripuladas de los Estados Unidos al espacio, así como la trayectoria de vuelo y alunizaje de la Apollo 11, la primera en alunizar. Calculó el trayecto de la Apollo 13, y al fracasar la misión calculó el trayecto de vuelta a la Tierra. La alta precisión matemática de Johnson la llevó a ser quien verificara las trayectorias de varias misiones espaciales.
Publicó 26 artículos. En 2015 el presidente Obama la honró con la Medalla Presidencial de la Libertad. En 2016 las nuevas instalaciones de investigación en informática de la NASA en Langley, Virginia, fueron nombradas en su honor. Las vivencias de ella y sus compañeras afroamericanas en la NASA, están plasmadas en la película Talentos Ocultos (Hidden Figures) de 2017.
Katherine Johnson falleció el 24 de febrero de 2020, a la edad de 101 años.
INÉSA BENEDICTOVNA KOZLÓVSKAYA
Nació en Harbin, Heilongjang, China, en 1927. Su padre Benedict Israelovich Kozlóvsky era Viceconsul de la Unión Soviética en China. En 1938 regresaron a Moscú, para que él ocupara la Dirección del área de Literatura Nacional en la Biblioteca Estatal Lenin.
En 1941 iniciaron los años más duros, los nazis invadieron la Unión Soviética, con el horrendo plan de aniquilar a 60 millones de ciudadanos soviéticos. Lograron la mitad, 30 millones, en su mayoría civiles, murieron por la locura de un hombre y sus fanáticos seguidores. Para los soviéticos fue una guerra de supervivencia.
Después de la guerra, Inésa se graduó en fisiología por la Universidad Médica Estatal de Moscú en 1954. Trabajó en el Instituto Médico con los profesores Piotr Kuzmich Anóxin y Mijail Aleksandrovich Usiévich. Entre 1966 y 1971 trabajó con el fisiólogo Neal Edgar Miller en la Universidad Rockefeller en Nueva York, Estados Unidos. En 1976 obtuvo su doctorado en Instituto de Fisiología Pavlov de Rusia. Desde 1977 trabajó en el Instituto de Problemas Biomédicos de la Academia de Ciencias de Rusia, IMBP-RAS, en donde se involucró en la fisiología en el espacio, dejando su mayor legado científico, en beneficio de los vuelos espaciales tripulados de todo el mundo.
Como es usual en medicina, los estudios médicos inician con animales. La Unión Soviética y después Rusia, con la participación de Inésa Kozlovskaya y varios más, condujeron el proyecto BION, de 11 satélites espaciales en la órbita terrestre, entre 1977 y 1996. En el proyecto participaron: Checoslovaquia y después la República Cheha, Rumanía, Hungría, Polonia, Francia, Bulgaria, la República Democrática de Alemania, Reino Unido, Canadá y Estados Unidos.
Abordo de los satélites Cosmos de BION, viajaron ratas, salamandras, peces, moscas, aves, gusanos, hormigas, los macacos: Zhaskanya, Zabiyaka, Lalik y Multik, así como plantas, esporas y hongos. Se experimentó con diferentes aceleraciones de gravedad artificial, mediante una centrífuga, estudiaron los efectos gravitatorios adversos en el tracto gastrointestinal, en el sistema endocrino, en el linfático, oseo y ocular, en la sangre y en los músculos. Se estudió el cáncer en las plantas, el envejecimiento de las moscas de la fruta en gravedad cero. La embriogénesis aviar, es decir, la generación de un organismo pluricelular, en este caso aves. Ratas preñadas recibieron dosis de radiación espacial, a la que todo astronauta y cosmonauta está expuesto. Una vez en tierra, las ratas dieron a luz a camadas sanas, por citar algunos experimentos.
Inésa Kozlóvskaya dirigió los exámenes médicos de las tripulaciones de las Estaciones Espaciales Salyut 6, Salyut 7, Mir y la actual Estación Espacial Internacional. Sus estudias la llevaron a fundar la Escuela de Fisiología Gravitacional y de los Movimientos.
En los años 90, inicia la cooperación NASA - Roscosmos, los transbordadores de Estados Unidos comienzan a llegar al Complejo Orbital Mir (Estación Espacial). Gracias a las investigaciones de Inésa Kozlóvskaya y a la experiencia soviética en Estaciones Espaciales, 7 Salyuts, la Mir y la actual Internacional, se consiguieron importantes récords de permanencia en el espacio, vitales para los futuros viajes a la Luna o Marte.
En particular, los récords femeninos de larga duración en el espacio van así: en el Complejo Orbital Mir, Elena Kondakova de Rusia hizo 169 días en 1994 y Shanon Lucid de la NASA, 188 días en 1996. En la Estación Espacial Internacional, en 2014, Elena Serova de Rusia estuvo 167 días y Samantha Cristoforetti de Italia, 199 días. De la NASA, Sunita Williams, hizo 200 días en 2007. Anne McClain, 204 días en 2019. Peggy Whitson 289 días en 2017 y Christina Koch, 329 días alcanzados en 2020.
Inésa Kozlóvskaya, la investigadora más importante en el área de la fisiología en el espacio, publicó más de 300 artículos y 4 monografías, sobre la fisiología y la fisiología en el espacio y los movimientos en gravedad cero.
Falleció el 19 de febrero de 2020, a la edad de 92 años. german@astropuebla.org