¿Qué son los planetas retrógrados?

Los vemos avanzar, detenerse y retroceder respecto al fondo de estrellas

Germán Martínez | Sociedad Astronómica de Puebla

  · domingo 5 de julio de 2020

Conforme la Tierra avanza, el planeta Saturno parece desplazarse hacia atrás, lo que interpretamos como movimiento retrógrado. Gráfico: Germán Martínez Gordillo | Sociedad Astronómica de Puebla

Cuando desde la Tierra seguimos a los planetas durante varias noches, los vemos avanzar, detenerse y retroceder respecto al fondo de estrellas.

¿En serio los planetas se detienen y retroceden? Si, y veamos cómo sucede.

LOS LUCEROS ERRANTES

Hace milenios, los observadores de la antigua Grecia al observar el cielo nocturno, agruparon a las estrellas en figuras acorde a su mitología, figuras llamadas constelaciones.

Estas agrupaciones no existen en el cielo estrellado, es decir, las constelaciones no existen más allá de nuestra imaginación y perspectiva. Aunque desde la Tierra veamos a dos o más estrellas cercanas una de la otra, en realidad están separadas por millones de años luz, puede que ni siquiera exista relación gravitacional entre ellas o que hayan nacido de nebulosas distintas. Es nuestra perspectiva la que agrupa a las estrellas y es nuestra imaginación la que le da interpretaciones mitológicas.

Composición de varias fotografías de la posición de Marte, es evidente el movimiento retrógrado. Fotografías tomadas entre agosto de 2007 y mayo de 2008. Foto: Cortesía Tunç Tezel - Turquía

Al pasar los años, las figuras de las constelaciones poco o nada han variado. Las estrellas perecen estar firmes en su posición. Por tal motivo al cielo estrellado se le llama también el Firmamento.

En realidad las estrellas si se mueven, pero la distancia a ellas es tan grande que no nos percatamos de su movimiento. Hasta que comparamos mapas estelares de diferentes décadas se aprecia un desplazamiento pequeño de las estrellas. Por ejemplo, al salir de viaje, los postes al borde de la carretera parecen avanzar rápido hacia atrás, los árboles dentro del paisaje parecen moverse a menor velocidad y las montañas lejanas apenas si parecen moverse. Las estrellas están tan lejos que no notamos su movimiento en años.

Pero aparte de las estrellas, hay otros luceros brillantes que se mueven sobre el fondo de estrellas. Luceros que avanzan, se detienen, regresan, se detienen de nuevo y retoman su camino. A estos luceros los griegos les llamaron errantes, con la palabra griega propia para ello: πλανητες planetés o planeta.

Foto: Abraham González | El Sol de Puebla

Las distancias de las estrellas de la constelación de Orión. Desde la Tierra parecen estar a la misma distancia. Gráfico: Germán Martínez Gordillo | Sociedad Astronómica de Puebla

EL MOVIMIENTO ERRANTE

Al viajar en tren o autobús, si contiguo nuestro hay otro tren o autobús moviéndose en la misma dirección pero a una velocidad inferior. En algún momento lo alcanzaremos y rebasaremos. Desde nuestra posición parecerá que el otro vehículo se desplaza hacia atrás.

Igual sucede con los planetas en el Sistema Solar, cada uno se encuentra sobre su propio carril alrededor del Sol, la órbita. Además, los planetas recorren distancias distintas a velocidades distintas. Conforme el planeta se aleja del Sol, la velocidad disminuye y la órbita es mayor. Mercurio es el planeta más rápido y al ser el más cercano al Sol, recorre la menor distancia en su órbita, viaja a 47.4 km/s y le toma 88 días darle una vuelta al Sol, le sigue Venus a 35 km/s con 224 días, la Tierra viaja a 29.8 km/s y tarda 365 días en completar una vuelta, lo que llamamos año, Marte viaja a 24.1 km/s y tarda 687 días, Júpiter a 13.1 km/s tarda 11.8 años, Saturno a 9.7 km/s tarda 29 años, Urano a 6.8 km/s tarda 84 años, Neptuno a 5.4 km/s tarda 164 años y el planeta enano Plutón viaja a 4.7 km/s y tarda 248 años en darle una vuelta al Sol.

Al igual que con el tren, es la diferencia en la velocidad y el tiempo de traslación, que hace que desde la Tierra veamos avanzar a los planetas, detenerse y luego retroceder. El movimiento retrógrado de los planetas es un movimiento aparente.

Movimiento retrógrado de Marte durante 2003. Gráfico: Eugene Alvin Villar

OBSERVANDO

Si desea observar el movimiento retrógrado de los planetas no necesitará de binoculares o telescopio, excepto para Urano y Neptuno. Plutón no es posible observarlo.

Deberá observar varias noches durante meses, ya que con una sola noche de observación, no será capaz de ver cómo los planetas se desplazan sobre el fondo de estrellas.

Prepare su observación, estas son las fechas en 2020, del inicio y fin del movimiento retrógrado: Mercurio, retrógrado del 18 de junio al 12 de julio y del 14 de octubre al 3 de noviembre. Venus retrógrado del 13 de mayo al 25 de junio. Marte retrógrado del 10 de septiembre al 16 de noviembre. Júpiter del 15 de mayo al 13 de septiembre. Saturno del 11 de mayo al 29 de septiembre. Urano del 16 de agosto al 15 de enero de 2021. Neptuno del 24 de junio al 29 de noviembre. Se recomienda iniciar las observaciones antes de estas fechas y continuarlas después de ellas, para poder apreciar cómo les planetas avanzan y se detienen.

Leer más: Las Lunas del Sistema Solar

Para las fechas de otros años, descargue en su computadora, teléfono celular o tableta un programa de astronomía o de planetario (no de astrología). Identifique a un planeta y avance días, semanas y meses, verá a los planetas avanzar y retroceder. Con esas fechas, podrá planear su observación.

Todos los planetas presentan movimiento retrógrado, incluso la Tierra si se observara desde otro planeta. El movimiento retrógrado es un movimiento aparente debido a la posición y desplazamiento de cada planeta. Las interpretaciones por su parte, corresponden a nuestra imaginación, miedos y esperanzas. german@astropuebla.org

La Tierra cambia de posición alrededor del Sol en el año, pero la inclinación es la misma (al menos en pocas décadas). Un polo está 6 meses de día y el otro polo 6 meses de noche. Gráfico: Germán Martínez Gordillo

Los cargueros Progres y HTV Kounotori (arriba), y abajo: Dragón y Cygnus. | Foto: NASA, Roscosmos y JAXA