Las niñas fuertes comienzan a criarse desde la infancia, por eso es importante darle seguridad y tranquilidad, generando un vínculo afectivo que durante su crecimiento le ayude a fortalecer su autoestima, su autonomía y su seguridad para enfrentarse al mundo.
Los roles y estereotipos de género, lamentablemente siguen arraigados en la sociedad y muchas veces no somos conscientes que a las niñas se les lanzan mensajes que quedan grabados en su mente y con el tiempo moldean su personalidad.
Por eso es importante crear vínculos afectivos adecuados con ellas desde los primeros años de vida, lo que será esencial en la construcción de su identidad y equilibrio emocional.
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¿CUÁL ES LA CLAVE PARA QUE SEA UNA MUJER FUERTE Y SEGURA?
El apego es la clave, con él garantizas las relaciones afectivas sanas y creas autonomía en ellas, además de fomentar una visión positiva de sí misma; también le da seguridad, autoestima, confianza, autonomía y efectividad para enfrentarse al mundo que le rodea.
Esto implica expresar abiertamente el afecto que sientes hacia ella, hacerle sentir que la quieres y la aceptas, tanto por las cualidades que te gustan como por las que no. Saberse amada y apreciada, hará que se convierta en una mujer fuerte y segura de sí misma.
¿CÓMO FORTALECER SU AUTOESTIMA Y SU AUTONOMÍA?
Desde que es pequeña, abrázala y tómala de la mano, esto la hará sentir protegida y segura.
Enséñale el significado del amor siendo tierno y atento con ella; dile que es bella con cualquier cosa que se ponga en cualquier circunstancia. Así se aceptará como es.
Cuando sea pequeña, juega con ella en su mundo de fantasía y abrázala. Cuando sea una adolescente, ayúdale con la tarea y organicen actividades juntos como hacer ejercicio, ver películas o bailar.
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Para incentivar su amor por el estudio y despertar su curiosidad para aprender, léele un libro antes de dormir y enséñale a reflexionar, halaga su inteligencia.
Para enseñarle a superarse a sí misma y que se esfuerce en destacar en lo que quiera hacer, foméntale amor por el deporte.
Déjala que se tropiece y se levante, para que aprenda a lidiar con los momentos difíciles y a ser responsable.
Confía en ella, aprende a ser su confidente. Cuando acuda a ti es porque te necesita, entonces escúchala, así aprenderá que su opinión cuenta. No la juzgues y apóyala.
Recuerda que el tiempo pasa, un día tu hija está jugando con muñecas, pero mañana irá a sus primeras fiestas y muy pronto se convertirá en mujer. Haz de cada momento inolvidable y educa una niña fuerte, dale así las herramientas para enfrentarse al mundo.