Cada fin de año los trabajadores reciben el beneficio llamado aguinaldo y año con año podemos encontrar en la web información acerca de cómo calcularlo, cuándo debes recibirlo e incluso donde denunciar el hecho de no recibirlo, pero te habías preguntado, ¿cómo surge este derecho?
La palabra no se limita a una compensación económica para los trabajadores al final del año, también se le conoce así al “itacate” de caramelos que los pequeños y no tan pequeños, reciben durante las posadas en esta misma época del año.
También era llamado aguinaldo cuando carteros, barrenderos, serenos y otros oficios semejantes, pasaban casa por casa en la zona donde prestaban sus servicios para felicitar a dichas familias por la Navidad, mismas de las que recibían una pequeña compensación económica como respuesta.
Pero este detalle que es recibido en el mes de diciembre, es impulsado por las fiestas de Navidad y Año Nuevo, aunque la compensación económica que reciben los trabajadores surgió en 1970 con su inclusión en la Ley Federal del Trabajo.
En específico sobre este beneficio, algunos historiadores refieren que su origen proviene de las tradiciones antiguas de Roma, pues señalan que llamaban strenae a los regalos que intercambiaban con amigos, en honor a los dioses, mismos que eran considerados como una señal de buen augurio.
Algunas tradiciones romanas atribuían el origen del aguinaldo al primero de enero por el Kalendariae strenae, al rey Tito Tacio, quien tenía la costumbre de ir ese día a recoger verbena, que era una planta medicinal, del bosque sagrado de Strenua, diosa del año nuevo, para así obtener la divina protección durante el año venidero.
También se encuentra relacionado con tradiciones celtas, pues ellos también tenían la tradición de otorgar un regalo cada año nuevo a sus cercanos, obsequio que era equiparado con el aguinaldo y que recibía el nombre de ergunad.
Pero con el paso de los años la tradición fue cambiando, pues los "aguinaldos herbáceos" fueron utilizados durante la Edad de Oro, posteriormente llegó una época en que eran alimentos de todas las clases, esta costumbre evolucionó y dio paso a piezas de oro, plata y bronce, luego a muebles y vestidos, aunque también fue frecuente regalarse pugilarios o dípticos de uso análogo al de nuestras carteras y agendas.
Por su parte la Iglesia tomó del paganismo tomó la práctica de los aguinaldos o regalos con motivo de los bautismos, que eran los regalos donaria, que parece se cambiaban entre el neófito y el ministro de la Iglesia o los padrinos y madrinas, mismos que consistían en medallas o lámparas con emblemas o inscripciones que declaran su destino.
En la Edad Media, los reyes, príncipes y magnates continuaron la fiesta de la entrada del año hasta el siglo XVI el primer día del año con cuyo motivo y ocasión se intercambiaban regalos, aunque cuando realmente surgió con la misma fuerza que en la antigüedad fue en el Renacimiento.
Fue en Francia que los regalos llamados étrennes dieron paso a una costumbre entre las gentes de alto nivel entregaban a los mozos de cafés, peluqueros, cocheros, entre otros, regalos y propinas.
Cabe destacar que es principalmente en los países latinoamericanos que se acostumbra a que los trabajadores reciban de parte de sus empleadores un pago extraordinario con motivo de las celebraciones de Navidad y Año Nuevo, establecido por mandato legal, bajo el nombre de aguinaldo.