Pulque, algodón de azúcar, mazapán, chocolate, nata, café, chispas, doble mantequilla y rompope, son sólo algunos de los sabores de hojaldras que ofrecen en la Pastelería La Colonial desde 1986 para la temporada del Día de Muertos.
Arturo Caballero, dueño de la pastelería de tradición recordó que hace cuatro años comenzaron a vender hojaldras de chocolate y tras el éxito en ventas, continuaron produciendo sabores hasta llegar a 15 diferentes.
“La gente ya está fastidiada del agua de azar, sobre todo la juventud; el agua de azar es para las personas grandes (…) sacamos chocolate y fue un éxito, y dijimos: vamos a empezar a sacar más”, dijo en entrevista con El Sol de Puebla.
En la primera pastelería, ubicada en la 5 Norte entre 12 y 14 Poniente de la capital poblana, 30 personas se dedican a producir y vender entre de 16 y 20 mil hojaldras de todos los sabores al día, todo esto en cuatro hornos de capacidad hasta de 40 charolas de pan.
Desde que detectaron que a las nuevas generaciones les gustan los sabores distintos, dijo que se convirtieron en “enemigos del agua de azar, porque ya la generación es más atrevida”. Por lo que resaltó la idea de poner colores en la hojaldra de algodón de azúcar, aunque los sabores más vendidos sigan siendo: nata y chocolate.
El dueño de la pastelería relató que, en algún punto buscarán cambiar el catálogo de sabores que manejan “para no aburrir a la gente” ni llenarse de trabajo teniendo más, ya que de ser demasiados, los panaderos pueden equivocarse en la producción de las hojaldras.
Sin embargo, Arturo Caballero comentó que han visto una disminución de hasta 60 por ciento en las ventas de este año por la pandemia del Covid-19, por ello, han tenido que aumentar la producción de hojaldras con la intención de bajar los precios, de forma que ahora cada una de las hojaldras, sin importar el sabor, cuesta 5 pesos.
Además, lamentó el cierre de los panteones, pues dijo que las ventas se incrementaban cuando se ponían las ofrendas de los Santos Difuntos, por lo que ahora prevén una baja en el consumo de 30 por ciento. “Del cien por ciento de las ofrendas, 30 se ponían en el panteón y al cerrarlos se reduce, más otro 30 por ciento porque no hay trabajo; por la pandemia la gente perdió su chamba”.
Reiteró que únicamente habían visto una reducción en sus ventas hace tres años, después del sismo del 19 de septiembre que dejó a la ciudad en ruinas; sin embargo, en aquella ocasión la disminución sólo fue de 25 por ciento “nunca nos había bajado tanto la venta”.
Pastelería La Colonial ha funcionado desde hace más de 40 años, de forma que ya cuenta con otras tres sucursales: en Fayuca, San Francisco Xochimehuacán y San Pablo del Monte, Tlaxcala, a las que todos los días se reparten entre cien y 500 hojaldras de distintos sabores.