Baño seco, opción ecofriendly para convertir tus heces en composta

En 1775 Alexander Cummings patentó el primer diseño del inodoro, desde entonces se convirtió en un elemento indispensable a alrededor del mundo y a pesar de haber tenido algunos cambios, en esencia sigue siendo lo mismo, sin embargo, en muchos hogares y comercios han optado por una alternativa sustentable.

Se trata de los baños secos, que como su nombre lo indica, no funcionan con agua, por lo que ahorran una gran cantidad de este recurso, además, se le puede encontrar un nuevo uso a los desechos humanos; de este modo es como se llevan a cabo dos estrategias ecológicas, mientras se puede satisfacer una necesidad fisiológica.

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Poco a poco se ha convertido en una opción popular, pues ya hay varias empresas que se dedican a su fabricación, algunas de ellas operan en México; es así como mucha gente podrá pedir uno para tenerlo en su vivienda. Por otro lado, algunos hoteles amigables con el ecosistema igual han decidido implementarlos.

¿Cómo funcionan los baños secos?

Los baños ecológicos surgieron de la necesidad de ahorrar agua, al igual que para evitar que los desechos humanos contaminen, al contrario, pues así pueden nutrir al suelo. Tienen que ser construidos en espacios con ventilación que va de los 30 o 60 centímetros de profundidad.

Estos baños a simple vista son iguales que los tradicionales, sin embargo, al interior de la taza tienen una cubeta o contenedor desmontable con aserrín, además, junto hay un depósito con más aserrín, el cual se utiliza para cubrir las haces fecales y orina.

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Así se ve un baño seco. Foto: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo

De esta manera es como una persona lo usa de forma habitual, pero al terminar no baja la palanca, sino que cubre sus desechos, igual, el papel higiénico usado se deposita al interior de la taza y listo. Estos espacios se crearon para no almacenar malos olores, por eso mismo es que suelen ponerlos a la intemperie.

¿Qué hacer con las heces fecales?

En cuanto la taza se llena, los usuarios tienen que vaciar todo el contenido en un compostero, aquí tendrán que mezclarlo con hojas secas y material comportable seco. En este lugar tendrá que permanecer de seis meses a un año para que se pueda usar como abono.

Este tiempo de espera es necesario para que se puedan eliminar las bacterias y posibles patógenos que tengan los residuos. Después de este periodo podrán ocuparse para nutrir a las plantas incluso a los cultivos. Estas son las claves para tener un baño seco:

• Utilizar una taza para baño seco profesional, no ocupes aquellas que se diseñaron para otra cosa.
• Añade plantas, de esta forma tendrás un mejor control de los malos olores.
• Tapa bien todos los desechos.
• Usa recipientes originales y especiales para el material seco.