Escoba de ‘brujita’, ¿por qué las usan las 'naranjitas' o personas que barren las calles?

Pocas personas saben que “escoba” es el nombre de una planta muy parecida a la retama, con cuyas fibras se confeccionaba un artefacto para barrer

Mary Carmen M. Ávila | El Sol de Puebla

  · miércoles 5 de abril de 2023

Naranjitas trabajan limpiando las calles de Puebla. Foto: Bibiana Díaz | El Sol de Puebla

De accesorio mágico para brujas a utensilio de limpieza, así son las famosas escobas de “brujita”, un artefacto indispensable para las labores que día a día las naranjitas o barrenderas y barrenderos de las calles utilizan para realizar su trabajo, pero ¿por qué las prefieren de vara?

Pocas personas saben que “escoba” es el nombre de una planta muy parecida a la retama con cuyas fibras se confeccionaba un artefacto para barrer; sin embargo, este artilugio es más conocido por los símbolos que representan para acompañar a las famosas brujas que con ellas sobrevuelan, pues se dice que el mango de las mismas lo embadurnaban con ungüentos afrodisiacos y al colocarlo para sentarse acababan “volando”.

No obstante, la Real Academia Española (RAE) define la palabra como un “utensilio compuesto por un haz de ramas flexibles o de filamentos de otro material sujetos normalmente al extremo de un palo o de un mango largo, que sirve para limpiar el suelo”. A pesar de que hoy en día las conocemos de muchos tipos y materiales, este día te hablaremos sobre aquellas que son utilizadas por los trabajadores de la limpieza.

¿Por qué las "naranjitas" usan las escobas de "brujita"?

En la ciudad de Puebla día a día las barrenderas, también conocidos como “naranjitas”, integran las cuadrillas que diariamente recorren las calles y avenidas para recolectar los residuos generados por la naturaleza o por la actividad humana.

Por tal motivo, diariamente estos empleados cargan con escobas de vara de perlilla, de palma o de mijo, para empujar un carrito recolector de dos tambos de 200 litros con base de ruedas.

Cuando se trata de barrer calles y avenidas, las barrenderas utilizan aquellas de vara de perlilla natural, una especie de arbusto que crece en los bosques del Estado de México y que se cosecha a través de un permiso de Manejo Forestal.

Cada vez que las personas pasan al lado de los “naranjitas”, algunos se han llegado a preguntar por qué utilizan ese tipo de escobas, cuyas cerdas son bastante largas y duras, y la respuesta es que este tipo de utensilios son ideales en el barrido de basura pesada, hojarasca, jardinería y residuos en la vialidad urbana.

Usualmente, la escoba de vara para limpieza está compuesta de tres piezas, mango, base y cuerpo de varas y, debido a su diseño, éstas ayudan al usuario a recolectar mayor basura en menor tiempo, además de que evitan que el polvo se levante, a diferencia de hacerlo con una convencional.

Entre las ventajas que tienen este tipo de accesorios de limpieza, es que su durabilidad en promedio es de 12 veces la de una escoba normal, que sus costos administrativos y operativos son menores y que son reciclables cuanto acaba su uso.

¿Cuál es el origen de la escoba?

Los orígenes de la escoba tal y como la conocemos en la actualidad se remonta a la época del Renacimiento, un momento histórico en el que puede decirse que nacieron los primeros prototipos de este elemento fundamental en nuestra vida diaria.

En un principio, se trataba de un instrumento muy sencillo basado en un manojo de ramas atadas que surgió ante la necesidad del ser humano de retirar del suelo todo aquello que molestaba o que ensuciaba las distintas superficies. Ya en el siglo XIX la escoba se perfecciona gracias a los Shakers, una sociedad unida de creyentes en la Segunda Venida de Cristo y es así cómo surge la que hoy en día usamos para barrer.

Es importante mencionar que, en aquella época, la escoba se asociaba a un instrumento para barrer los males divinos y humanos, además de que también se usaba para barrer las cuevas, cabañas y castillos.