Ana Kristy Martínez López es una joven estudiante que fue seleccionada para participar en el siguiente proyecto de La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA). Para ser reclutada realizó un proyecto que consistió en una propuesta innovadora que contribuirá a cumplir los objetivos de los vuelos espaciales.
Es alumna de sexto semestre de la preparatoria Tepeaca de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), y asegura que, al concluir su educación media superior, ingresará a la Ingeniería en Mecatrónica en esta misma institución, por ahora se enfocará en desempeñar satisfactoriamente su trabajo dentro del organismo estadounidense.
Ella comentó que desde muy pequeña se sintió atraída por todo lo relacionado al funcionamiento de las cosas, de esta forma comenzó su interés que tiempo después empleó para trazar alternativas que les permitieran a los científicos hacer recorridos fuera del planeta.
LA HISTORIA DE ANA KRISTY MARTÍNEZ
Ana Kristy es la menor de tres hermanos, su madre es ama de casa, mientras que su padre es docente de primaria. Ella comentó que creció en un ambiente que le permitió tener una mejor compresión de la tecnología, esto hizo que se interesara en saber todavía más.
“Veía a mi hermano separar las piezas de su carro a control remoto y armarlo para que volviera a funcionar. Además, mi papá tenía un amigo que venía a arreglar aparatos eléctricos, licuadoras, así como computadoras. Desde ahí me llamó la atención conocer el funcionamiento de diversas cosas”, indicó.
Al crecer se dio cuenta que una de sus metas más importantes era conocer las operaciones de la NASA, por eso cuando le dieron la noticia de su inclusión en el programa se sorprendió: “Para mí significa un gran sueño cumplido. Es un gran reconocimiento para mí, mi familia y amigos”.
Además, ella confesó que sus expectativas se superaron, pues nunca que pensó que conseguiría el acceso directo a sus museos, laboratorios y parques de experimentación para entrenar como un astronauta.
SU LLEGADA A LA NASA
Ana Kristy realizó un proyecto que consistió en una propuesta de adaptación a los paneles solares de los rovers que son enviados a Marte, para ello, hizo un plan en el que fusiona la técnica del origami en el despliegue de los paneles, con esto pretende que tengan una mayor resistencia, especialmente ante las tormentas de viento.
Para que esto funcione, los paneles necesitan llevar sensores con los detectarán si es adecuado que se abran o permanezcan cerrados; se inspiró en las obras arquitectónicas que ya emplean esta estrategia.
Gracias a este proyecto, ella se volvió candidata para participar en el International Air and Space Program de la NASA. Al final quedó en la lista de los 60 seleccionados a nivel mundial, en cuanto supo la noticia, se lo informó a sus padres, quienes de inmediato le brindaron su apoyo.
De esta manera, el próximo mes de noviembre Ana Kristy viajará a Huntsville, Alabama, Estados Unidos, en donde hará una estancia de 5 días en la que estará colaborando con un grupo de especialistas para analizar la iniciativa del viaje a marte.
También estará en la construcción de cohetes, e irá a clases de entrenamiento para astronautas dentro y fuera del espacio, operaciones de vuelo y elaboración de una base del 'astromóvil marciano'.
“Durante la mañana tendré que trabajar en el proyecto en equipo y por la tarde en cuestiones de experimentación que puedan ayudar al trabajo grupal o solo para comprender algunos temas”, expresó la alumna de la BUAP.
Por ahora, ella continuará reforzando sus conocimientos al acudir a cursos científicos, también asiste a un taller de cohetería y de análisis de la tecnología en el emprendimiento aeroespacial. Al terminar la preparatoria tiene pensado entrar a la Ingeniera en Mecatrónica, e igual quiere especializarse en Ingeniería Aeroespacial.