Richard Brock es un hombre de 67 años del Reino Unido al que una máquina de detección de metales antigua le cambió la vida al permitirle encontrar una pepita de oro enterrada bajo tierra.
De acuerdo con su relato, Brock se ha dedicado a la detección de metales como pasatiempo desde hace 35 años y en mayo del 2023 decidió unirse a una expedición de búsqueda en los campos de cultivo de Shropshire Hills.
El día no pintaba nada bien para él, debido a que llegó muy tarde a la expedición tras un viaje de tres horas y media desde su casa. Al estar en el lugar otro problema surgió debido a que tuvo problemas con su equipo de detección y solo pudo utilizar una máquina más antigua y que no funcionaba correctamente.
Debido a que era más antigua la máquina tenía fallos en la pantalla y solo le había permitido encontrar estacas viejas y oxidadas.
“Llegué aproximadamente una hora tarde, pensando que me había perdido la acción. Todos los presentes tenían todo este equipo actualizado y yo me lance con tres máquinas viejas”, afirmó Brock. “La máquina que estaba usando estaba prácticamente arruinada, solo funcionaba a medias”.
Después de 20 minutos llegó el momento en que cambió la vida de Richard Brock al detectar enterrada a unos 13 a 15 centímetros, lo que era una enorme pepita de oro con un peso de 64.8 gramos.
Esta pepita ya fue nombrada como “Hiro’s Nugget”, y Richard decidió colocarla en subasta por lo que se espera que alcance un valor de 30,000 libras esterlinas, poco más de 631,317 pesos.
La pepita fue encontrada en un sitio cercano al pueblo de Much Wenlock, en donde se piensa que antiguamente atravesaban unas líneas de ferrocarril en donde se transportaba piedra distribuida desde Gales en lo que era un área conocida por la presencia del oro.
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De igual forma, Shropshire Hills es un territorio que se cree que alguna vez bajo un océano prehistórico y es común el desenterrar trozos de coral.
El más grande descubrimiento de oro en Inglaterra
Esta pepita de oro será subastada por medio de la casa Mullock Jones en una subasta programada y que se extenderá hasta el 1 de abril, en donde se espera que alcance el precio de 30,000 libras esterlinas con su proyección más grande el alcanzar las 40,000 libras.
Se considera a este uno de los más grandes descubrimientos de pepitas de oro en el Reino Unido. Solo fue superado por una de 97.12 kilogramos en Anglesey/Ynys Món en Gales en 2016 y uno más en Escocia y que tiene el récord con el peso de 121.3 gramos en el 2019.
Dentro del territorio de Inglaterra sí es el descubrimiento más grande para una pepita de oro, ya que el registro anterior era de 54 gramos.
La expedición fue nombrada como una búsqueda del tesoro, pero ninguno de los compañeros de Richard Brock pudieron creer su descubrimiento, algunos incluso probaron suerte en el mismo sitio para tener la misma suerte con un poco de oro, sin el mismo éxito.
“Simplemente demuestra que realmente no importa qué equipo uses. Si caminas sobre el hallazgo y estás lo suficientemente alerta a lo que podría estar acechando debajo del suelo, eso marca la diferencia”, afirmó Richard Brock.
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