Dentro de plaza comercial Triángulo Las Animas se encuentra una cafetería–repostería que ha llamado la atención de la gente por su tonalidad rosa y las diferentes piezas que la conforman. Dicho establecimiento lleva por nombre “La Vie en Rose (taller de repostería)” y sus creadores son los poblanos Susan Catarino y Carlos Figueroa, quienes narran a esta casa editorial la historia del lugar.
Ambos emprendedores explican que la marca La Vie en Rose nació hace aproximadamente nueve años, y la dueña era otra persona, solamente que el concepto del lugar era vender exclusivamente postres franceses, pero por temas familiares les traspasaron el lugar.
Fue en el año 2019 cuando decidieron convertir el sitio también en una cafetería e instalarla en el ´Triángulo Las Animas´ ya que los clientes les pedían más productos “querían sabores, bebidas, nos dimos cuenta de que teníamos que crecer”, señalan.
Color de rosa
Casi al inicio de la pandemia, Susan y Carlos se casaron, fue ahí que los dos unieron ideas y decidieron remodelar el sitio para hacerlo más grande y ponerle un diseño, que, hasta la fecha, ha generado impresión en personas de todas las edades por la iluminación, la decoración, los spots para fotos y el tono rosado.
“Es una idea de los dos, nos gusta el arte, el arte moderno, nos gusta divertirnos, realmente todo lo que se ve en la tienda son nuestras ideas, todo lo que imaginamos lo proyectamos en cada espacio del local, vemos cosas que nos gustan y decidimos agregarlo, es un espacio de arte sin duda lleno de añoranza”, comentan.
Catarino revela que era su sueño desde años atrás. “Desde que estudiaba fui comprando cosas para cuando tuviera mi local los colocara, es un gran consejo a los emprendedores, hay que ponerse metas e ir poco a poco llegando a ellas, creerse lo que se hará”.
Por su parte Carlos destaca que buscan que la gente salga de su rutina al llegar a su cafetería. “Queremos inspirar al mundo, a las personas, cuando eres lindo con una persona esa persona se contagia y es linda con otras, es un efecto dominó, queremos que se lleven una dosis de ternura por el lugar y la atención, que se salgan de la rutina y vivan un momento agradable”.
Asimismo, agregan que la publicidad se la han ganado de manera orgánica, ya que es la misma clientela la que comparte fotografías del sitio (la mayoría de veces en Instagram).