En Corea del Sur, el homicidio de una mujer ha generado una gran conmoción, en especial porque el supuesto responsable ocultó el cuerpo por 16 años sin que las autoridades sospecharan de él. Este caso se difundió gracias a la prensa local, pero al poco tiempo logró salir del país, por lo que ahora ha dado la vuelta al mundo.
El hombre señalado de haber cometido este asesinato buscó la forma de esconder los restos de su expareja en una propiedad que rentaba, en donde estuvieron mucho tiempo sin que nadie se percatara de la verdad. Fue gracias al casero que este hecho se dio a conocer, pues, por trabajos de mantenimiento, realizó el hallazgo hace poco.
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Así fue como dio aviso a las autoridades, quienes de inmediato comenzaron con las indagaciones hasta que pudieron dar con el principal sospechoso, quien al inicio negó todas las acusaciones, pero más tarde aseguró que sí lo había hecho, por lo que ahora solo está a la espera de que se determine su futuro legal.
¿Cómo se registró este suceso?
De acuerdo con lo recopilado por las autoridades, todo comenzó en el año 2008, cuando el hoy detenido golpeó a su novia en la cara y cabeza con “un objeto contundente”; estos ataques provocaron que perdiera la vida.
La Agencia de Policía de la Provincia de Gyeongsang del Sur reportó que, según el varón, guardó su cadáver en una maleta que luego escondió en la terraza del departamento en el que vivía, en la ciudad de Geoje, a unos 300 kilómetros al sureste de Seúl.
En la terraza de esta vivienda colocó la maleta, que después cubrió con ladrillos pegados con cemento. Aquí dejó los restos por varios años sin que nadie sospechara lo que estaba ocurriendo.
La agencia de noticias EFE puntualizó que nadie podía ver este cambio en la vivienda, pues para notarlo era necesario ingresar al departamento, luego a la terraza, y detenerse en uno de los extremos más alejados.
¿Cómo lo descubrieron?
Pasó el tiempo sin que nadie sospechara sobre su paradero, principalmente porque la hoy occisa no tenía una relación cercana con su familia, por lo que su desaparición fue reportada hasta 2011, es decir, tres años después de que se registraran los hechos.
En 2016, el acusado tuvo que dejar el departamento luego de que lo arrestaran por consumo de drogas. El dueño de la propiedad optó por no rentar nuevamente ese espacio, sino que lo convirtió en un almacén.
Esto solo aumentó las posibilidades de que nadie viera la maleta. Hace poco, el dueño realizó algunas reparaciones en la propiedad, por lo que se topó con una placa de cemento y ladrillos y procedió a romperla.
Fue de este modo como hizo el hallazgo, por lo que dio aviso a las autoridades para que investigaran el caso. Tras una serie de indagaciones, dieron con el exnovio, quien al principio negó cualquier implicación.
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Incluso, el sospechoso había destacado que no sabía dónde estaba la mujer. Aun así, después de que se realizaran los interrogatorios correspondientes, confesó que él la había asesinado.