Este 2024, el Premio Nobel de la Paz fue otorgado a Nihon Hidankyo, una organización no gubernamental (ONG) que desde hace varios años se ha dedicado a trabajar en contra del uso de las armas nucleares, así como a apoyar a las víctimas de estos artefactos que fueron arrojados en Hiroshima y Nagasaki en 1945.
De acuerdo con Europa Press, se le entregó este galardón “para lograr un mundo libre de armas nucleares y por demostrar, a través del testimonio de sus testigos, que las armas nucleares nunca deben volver a usarse”, explicó el presidente del comité noruego del Nobel, Jorge Watne Frydnes.
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Al respecto, este directivo añadió: “Nuevos países parecen estar preparándose para adquirir armas y están lanzando amenazas de utilizarlas en las guerras de hoy en día. En este momento de la historia de la humanidad, vale la pena recordar qué son las armas más destructivas que el mundo haya visto jamás”.
¿Cuál es la historia de esta ONG?
Nihon Hidankyo es una organización formada por sobrevivientes de las bombas atómicas lanzadas en Hiroshima y Nagasaki en 1945. Se fundó unos años después de este ataque, con el objetivo de reunir a los ‘hibakusha’, nombre dado a los sobrevivientes, para compartir sus experiencias y obtener reconocimiento, su fundador es Toshiyuki Mimaki.
Su creación marcó un antes y después en la historia del activismo antinuclear, ya que surgió en un momento en que el mundo enfrentaba crecientes tensiones por la proliferación de armas de este tipo, según informaron en su portal web.
Se informó que, al inicio, los ‘hibakusha’ se sentían aislados y estigmatizados por la sociedad, ya que muchas personas no comprendían los efectos devastadores de la radiación. Sufrían enfermedades crónicas, problemas de salud mental y discriminación laboral.
Ante esta situación, decidieron organizarse para exigir atención médica, compensaciones económicas y derechos fundamentales. Uno de los momentos clave en la historia de Nihon Hidankyo fue la primera conferencia internacional de estos sobrevivientes, realizada en 1956.
En este evento se consolidó la idea de que los integrantes de este sector no solo debían ser reconocidos como víctimas, sino también como portadores de un mensaje de paz para la humanidad.
Su labor no se ha detenido
Desde entonces, la organización se ha centrado en dos objetivos principales; la mejora de las condiciones de vida de los hibakusha y la campaña para la erradicación de las armas nucleares en todo el mundo.
Los testimonios de los ‘hibakusha’ comenzaron a tener eco en el ámbito internacional, especialmente en conferencias sobre desarme nuclear y en foros de las Naciones Unidas.
A lo largo de los años, Nihon Hidankyo ha seguido organizando conferencias y eventos conmemorativos, como la ceremonia anual del 6 de agosto en Hiroshima y del 9 de agosto en Nagasaki, donde se honra a las víctimas.
Por otro lado, los representantes de esta fundación señalaron, este 2024, al recibir el Premio Nobel de la Paz, que han comparado el caos de las armas nucleares con los ataques a los infantes que viven en la Franja de Gaza.
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“En Gaza están abrazando a niños empapados en sangre. Tras la guerra, muchos niños quedaron huérfanos por las bombas atómicas, el mismo sufrimiento que el de los niños de Gaza”, afirmaron en la ceremonia.
