El asma y la rinitis alérgica son de las enfermedades alérgicas más frecuentes, aunque existen pruebas para detectarlas a tiempo y ofrecer tratamiento oportuno, señaló el médico José Juan Herrera Bonilla, adscrito al Hospital de Especialidades “San José”, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En el marco del Día mundial de la alergia conmemorado el 8 de julio, dio a conocer que esta enfermedad “es una manera distinta de reaccionar del organismo” ante la exposición a sustancias extrañas y se produce a través de la aparición de diversos síntomas como picor, estornudos, mucosidad y congestión nasal.
➡️ Únete al canal de El Sol de Puebla en WhatsApp para no perderte la información más importante
El alergólogo agregó que aunque la sintomatología puede durar de 48 a 72 horas, hay casos más graves en los que el paciente puede experimentar dificultad para respirar, alteraciones en la presión arterial e incluso tener dificultades que pongan en riesgo la vida.
Por lo anterior, señaló que es indispensable que las personas prevengan la aparición de alergias, ya que desde edades tempranas se puede evitar la exposición a los alérgenos o detectar cuales provocan la enfermedad, sobre todo cuando existen antecedentes genéticos.
“Si uno de los cónyuges es alérgico quizá herede la condición en un 15 o 20 por ciento, si los dos son alérgicos se eleva mucho la condición y la probabilidad es del 50 o 60 por ciento, para prevenir, por ejemplo, en la recámara es importante no promover el uso de peluches, tapetes, alfombras, colectores de polvo, resguardar las cosas en cajas, eso genera acumulación de polvo y en el polvo están los alérgenos”, expuso.
Añadió que existen pruebas cutáneas o análisis de sangre que se realizan en el instituto para detectar las causas que provocan la alergia y ofrecer el tratamiento adecuado a cada paciente.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
El especialista señaló que existen medicamentos y tratamientos para pacientes alérgicos, siendo el principal la denominada “vacuna”, que es la inmunoterapia con la que se desarrolla la tolerancia a las sustancias que desencadenan los síntomas.
“En realidad es una hiposensibilización, que es el efecto contrario a lo que produce una vacuna, una vacuna sirve para crear anticuerpos y se proteja ante una toxina, en cambio en la hiposensibilización ocurre el efecto contrario, se construye una proteína que lo bloquea”, finalizó.