¿Sabías qué la circuncisión puede ser uno de los principales factores de riesgo en la famosa muerte de cuna? así lo indicó el doctor Eran Elhaik, de la Universidad de Sheffield en el Reino Unido, en un estudio realizado en 2019.
El síndrome de muerte súbita del lactante (SIDS, por sus siglas en inglés), también conocido como muerte súbita o muerte de cuna, hoy en día sigue siendo la principal causa de fallecimiento infantil en muchos países desarrollados. Incluso alrededor de 2 mil 700 bebés cada año pierden la vida por este padecimiento en Estados Unidos, y alrededor de 300 en el Reino Unido.
Y es que, la muerte en la cuna ocurre cuando un bebé aparentemente sano, menor de 12 meses de edad, fallece mientras duerme sin que se haya establecido una causa en una investigación post-mortem. A pesar de que se sabe que muchos factores aumentan el riesgo de este síndrome, como el tabaquismo materno y el hecho de compartir la cama, hasta hoy en día nadie está seguro de por qué sucede.
¿POR QUÉ LA CIRCUNCISIÓN PODRÍA DETONAR EL SIDS?
De acuerdo al estudio realizado por Eran Elhaik, sugiere que la gran pérdida de sangre causada por la circuncisión neonatal masculina (MNC), que se realiza en los primeros 28 días después del nacimiento, puede explicar una fuerte correlación observada entre la MNC y el SIDS.
“Un bebé tiene solo 11 onzas de sangre y puede perder fácilmente de 1 a 2 onzas en la circuncisión, el equivalente a dos a cuatro donaciones de sangre para un adulto”, reveló el médico a IFLScience, haciendo referencia a uno de sus estudios anteriores, efectuado en 2016.
“Con menos sangre, la presión arterial baja y el corazón tiene que trabajar más, lo que puede provocar un ataque al corazón, especialmente en los bebés cuyo corazón no terminó de desarrollarse o tiene otros defectos”, agregó.
En este sentido, mencionó que, en este último estudio analizó los datos sobre SIDS y la circuncisión neonatal masculina en 15 países, donde el examen post mortem de los bebés es obligatorio, e incluyeron 40 entidades de Estados Unidos.
Los resultados mostraron una fuerte correlación entre la circuncisión temprana y la muerte súbita, siendo así que, donde las tasas de circuncisión neonatal masculina son altas, ocurren tasas más altas de muerte súbita.
¿QUÉ PASA DURANTE LA CIRUCISION NEONATAL?
La circuncisión neonatal masculina generalmente se realiza en los primeros días después del nacimiento y está asociada con muchos riesgos para la salud como: sangrado, shock, sepsis, shock circulatorio, hemorragia, dolor y otras consecuencias a largo plazo, como el trastorno de estrés postraumático.
Durante la circuncisión se produce un aumento de la presión arterial, la frecuencia respiratoria y la frecuencia cardíaca del bebé, incluso con las técnicas más avanzadas, el sangrado se produce en más del 15 por ciento de los casos y si a esto, se aumenta que los bebés nacen antes de tiempo, es como experimentan el doble de complicaciones hemorrágicas que los bebés nacidos a término.
De esta manera, con la pérdida de sangre, también existe el peligro de que un volumen de sangre más bajo pueda provocar una presión arterial baja, lo que reduce la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos.
La presión arterial reducida también se ha asociado con la apnea obstructiva del sueño, una afección en la que las paredes de la garganta se relajan y se estrechan durante el sueño, lo que interrumpe la respiración normal. Las investigaciones muestran que los bebés que han muerto por muerte súbita tienen más probabilidades de haber experimentado apnea obstructiva del sueño.
Finalmente, el doctor Eran Elhaik comentó que, si bien el vínculo de la circuncisión neonatal masculina no se aplica a todas las muertes del síndrome de muerte súbita del lactante, argumentó que debe considerarse seriamente como un factor importante en el futuro.