La Secretaría de Salud en Puebla difundió que existen alertas sanitarias de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) para evitar el consumo de productos “Chupa panza” y “Me vale madre”, comercializados para bajar de peso y como suplemento alimenticio, respectivamente, debido a que no existe garantía de seguridad para su ingesta.
La dependencia federal indicó que en el caso de los productos conocidos como "Chupapanza", disponibles en gel, cápsulas, gotas, té y malteadas, incumplen con lo establecido en la legislación sanitaria vigente, ya que se publicitan de manera errónea y exagerada, además de que se les atribuyen propiedades como auxiliares en la reducción de peso, tallas, colesterol y triglicéridos.
La Comisión señaló que de forma errónea se indica que los productos tienen cualidades terapéuticas y rehabilitadoras, además de que no se deben comercializar como suplemento alimenticio, ya que incumplen con lo establecido en la Ley General de Salud.
Asimismo, señala que entre sus ingredientes se encuentra el Barmitol, que es de uso veterinario y está indicado para tratar las afecciones inflamatorias de los animales, además de otros como el extracto fluido de raíz de jengibre, sábila y naranjo amargo, que tienen propiedades toxicológicas.
“Adicionalmente pueden contener ingredientes de origen natural o sintético en distintas proporciones que, en combinación, pueden tener efectos secundarios nocivos o interactuar con otros medicamentos; al desconocer las concentraciones, las condiciones sanitarias de las materias primas, el proceso de fabricación y almacenaje de los productos, su consumo representa un riesgo para la salud de quien los utiliza”, destacó.
Respecto a los productos conocidos como “Me vale madre”, que se comercializan en presentaciones de tabletas, cápsulas y solución como suplementos alimenticios, la COFEPRIS destacó que al consumirlos se pone en riesgo la salud porque no cuentan con estudios que garanticen su seguridad, eficacia y calidad.
Detalló que entre sus ingredientes están la flor de tila, azahar, zapote blanco, flor de manita, tumbavaquero, rhodia y cartílago de tiburón, que no cuentan con evaluación de seguridad por parte de la comisión; además de otros como el toronjil, valeriana, pasiflora, espino blanco, gingko biloba, hierba de San Juan y ginseng, que no pueden emplearse en los suplementos alimenticios.
Indicó que en los mercados, a este tipo de productos se les atribuyen propiedades erróneas y exageradas, tales como aliviar dolores de cabeza y trastornos del sueño, combatir el estrés, reducir ansiedad, depresión, migraña y nerviosismo, así como combatir el reumatismo, artritis, mal de ciática y la descalcificación.
“Algunos productos que se comercializan como suplementos alimenticios y que se asocian con la relajación y el descanso de forma natural, pueden contener sustancias antipsicóticas y antidepresivas, desconociendo las dosis contenidas en dichos productos, causando efectos secundarios nocivos y adversos para la salud o en su caso interactuar con otros medicamentos”, acotó.
La dependencia enfatizó que ambos productos, que incluso se venden en páginas web o redes sociales, no deben ser consumidos por la población, de tal forma que exhortó a denunciar su venta ante la autoridad sanitaria.