La sobreprotección y el uso excesivo de dispositivos tecnológicos suponen un daño en el desarrollo cognitivo y emocional de las infancias. Aunado a ello, representan el desafío de no perder las relaciones familiares. para los padres de familia.
Lo anterior precisó Ivonne Martínez Hernández, docente de la Facultad de Psicología y del departamento de Educación Continua de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, quien señaló que en esta era digital, la relación entre menores y adultos se ha vuelto compleja.
“Sin embargo, actualmente, nos enfrentamos a dos realidades preocupantes: el maltrato infantil y la sobreprotección. Estos extremos en la relación entre padres e hijos pueden resultar en consecuencias negativas para el desarrollo emocional y social de los niños”, opinó la académica en una conferencia realizada en la casa de estudios.
La académica calificó como “una niña electrónica” a la sobreexposición que diversos menores tienen con dispositivos móviles, lo que resulta preocupante, toda vez que estas dinámicas lastiman la convivencia familiar.
Ante esto, hizo un llamado urgente a las familias a mejorar las relaciones con sus seres queridos, a cuestionar el tiempo que las niñas y niños dedican a los dispositivos móviles y los contenidos a los que tienen acceso.
En tanto, la falta de tiempo de calidad para los menores es otro factor que lastima dichas relaciones, provocados en su mayoría por el horario laboral, los largos traslados al hogar, entre otras ocupaciones.
Ante esto, resulta urgente equilibrar los horarios para no afectar las responsabilidades laborales y el cuidado que se le da a los menores.
Asimismo, recomendó a los tutores tomar en cuenta e implementar acciones de crianza respetuosa con los menores, a fin de favorecer el diálogo y el respeto en la familia, lo cual marcará favorablemente el futuro de las infancias.