El cuidado de los ojos es fundamental, pues son los principales órganos sensoriales, responsables de registrar la mayoría de la información que se recibe del mundo exterior. Una visión saludable nos permite realizar nuestras actividades cotidianas de manera eficiente, desde leer y conducir hasta interactuar con los demás.

Por esa razón, se debe hacer todo lo necesario para conseguir una salud ocular óptima que pueda proporcionar bienestar general y autonomía. Ante esta situación, los expertos recomiendan adoptar hábitos cotidianos con los que sea posible cuidar nuestra visión, que van desde una mejor alimentación hasta visitas constantes al oculista.

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Se destaca que este tipo de cuidados deben tener un mayor impacto en la era digital, ya que es común pasar varias horas frente a pantallas, lo que puede provocar síntomas como sequedad, visión borrosa y dolores de cabeza. Si quieres saber más, te daremos algunas recomendaciones de sitios como Mayo Clinic o el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés).

Hábitos diarios para una visión saludable

Ajusta la iluminación: Cuando mires televisión, es necesario tener la habitación iluminada. Si necesitas mirar de cerca, coloca una fuente de luz detrás de ti y apúntala hacia la página o tarea. Si lees en un escritorio, usa una lámpara.

Consume alimentos para proteger tu vista: Las zanahorias son una opción, pero eso no es todo. Los expertos recomiendan una dieta rica en variedad de frutas y vegetales, particularmente los de hojas verdes oscuras como la espinaca o la col rizada.

Toma descansos: Los especialistas señalan que cuando alguien pasa mucho tiempo en la computadora o el celular, puede olvidar parpadear, lo que puede causar cansancio ocular. Se puede aplicar la regla 20-20-20, que consiste en que cada 20 minutos se enfoque la vista a 20 pies de distancia (6 metros) por 20 segundos.

Cuídate del Sol: Evita lesiones y otros daños usando anteojos, gafas de seguridad y pantallas de seguridad. Para encontrar el tipo correcto que pueda otorgar la protección necesaria, se debe buscar la opinión de un oculista.

Haz actividad física: El ejercicio regular tiene grandes beneficios que van más allá de perder peso. Entre ellos se encuentran un mejor estado de ánimo, reducción del estrés, mantenimiento de un peso saludable y protección contra enfermedades graves de los ojos.

Usa lágrimas artificiales: Estos productos, de venta libre, pueden ayudar a prevenir y aliviar los ojos secos. Pueden usarse incluso cuando no hay ningún tipo de problema, pues así se puede obtener una correcta lubricación.

No uses cualquier artículo: La Mayo Clinic indica que se deben evitar las gotas diseñadas solo para quitar el enrojecimiento en los ojos, ya que pueden empeorar los síntomas del ojo seco.

Mejora la calidad del aire: El uso de un humidificador es una buena opción. Por otro lado, si fumas, considera dejar esa costumbre. Cambiar tu lugar a una zona diferente puede ayudar a reducir la cantidad de aire seco que se dirige a tu cara.

Utiliza los lentes adecuados para ti: Si trabajas con una computadora y necesitas anteojos o lentes de contacto, es indispensable gastar solo en aquellos especialmente diseñados para este tipo de tareas.

Visita a un experto: Una de las mejores herramientas para la prevención de daños son las visitas periódicas a un oftalmólogo; de esta manera se podrán detectar problemas a tiempo.