Hendra es el nuevo virus que se encontró en China y que ya afecta a dos provincias del país asiático. Por su origen y al ser trasmitido de los animales a las personas, muchos ya lo comparan con la Covid-19 e incluso lo han llamado Covid 2.0, pero los científicos piden que se trate a la enfermedad de otra forma.
A finales de 2019 en Wuhan, China es donde se encontró por primera vez el virus SARS-CoV-2 que provoca el coronavirus y que inició una pandemia que hasta el momento no se ha erradicado por completo.
La llegada de este nuevo virus ha causado preocupación en varios sectores de la población al mantenerse los casos de Covid y seguir en aumento aquellos de la viruela del mono, por lo que una nueva enfermedad podría significar regresar a los niveles de pandemia del 2020.
Nuevo virus en China, completamente diferente a Covid
Hace unos días fue cuando se dieron a conocer los primeros casos del nuevo virus de transmisión animal a humano encontrado en las provincias de Henan y Shandong en China con al menos 35 personas infectadas.
Estas infecciones han presentado el patógeno conocido como Langya henipavirus, a la que se le conoce como LayV, 26 de los pacientes encontrados estaban infectados de manera exclusiva con este virus y se registraron los casos desde finales de 2018 hasta principios de 2021.
Después de los primeros resultados informados por el New England Journal of Medicine, algunos científicos como Francis Balloux, experto en enfermedades infecciosas del University College London ya han pedido que no se le compare a la nueva enfermedad con el Covid al no ser similares.
“En esta etapa, LayV no parece en absoluto una repetición de Covid-19, pero es otro recordatorio de la amenaza inminente causada por los muchos patógenos que circulan en poblaciones de animales salvajes y domésticos que tienen el potencial de infectar a los humanos”, escribió en sus redes sociales @BallouxFrancois.
Hasta el momento tampoco existe evidencia de que el virus se propague de manera rápida como ocurrió en su momento con la Covid-19 y que lo convirtió en una emergencia sanitaria mundial en apenas unos meses después de su aparición.
El contagio de persona a persona tampoco ha sido comprobado, aunque no se considera como algo descartable. Hasta ahora la mayoría de los infectados se tratan de trabajadores agrícolas, un segundo grupo son trabajadores de fábricas y solo un caso en un estudiante.
“El coronavirus no será la última enfermedad contagiosa que provoque una pandemia, ya que nuevas enfermedades tendrán un impacto cada vez mayor en la vida diaria de la raza humana”, indicó el subdirector del departamento de Patologías Infecciosas del Hospital Huashan, afiliado a la Universidad de Fudan.
¿Qué se sabe del nuevo virus?
Este nuevo patógeno se encuentra relacionado a dos tipos de henipavirus conocidos que son el virus Hendra (HeV) y el Nipah (NV). El más peligroso de ellos es Hendra que puede llegar a provocar infecciones tanto asintomáticas como respiratorias agudas y encefalitis graves.
Otra de las preocupaciones es que algunos miembros de la familia de los henipavirus pueden llegar a matar a 75 por ciento de las personas que se infectan. Dentro de los síntomas que provoca se encuentran algunos como fiebre, fatiga, tos, pérdida de apetito y dolores musculares.
En el caso del virus Nipah es capaz de propagarse por gotas respiratorias, pero es mucho más mortal y es un patógeno que puede encontrarse en los murciélagos. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) es uno de los virus que podría provocar la próxima gran pandemia en el mundo.
Hasta el momento no existen vacunas para alguno de estos virus, pero ya existen laboratorios que realizan pruebas, pero que no han avanzado a la etapa con humanos
LayV también se encuentra más relacionado al virus Mojian, otro hepinavirus encontrado en China en 2012 y que se encontró en tres mineros que fallecieron al tener contacto con animales que vivían en la mina donde trabajaban.
Los investigadores explicaron que este nuevo hepinavirus se encuentra principalmente en musarañas, un pequeño mamífero parecido a un topo, pero del tamaño de un ratón. En la investigación se encontró que las musarañas tenían la tasa positiva más alta del virus, aunque también se detectó en perros y cabras, pero en menor medida, lo cual también marca una diferencia importante con la Covid-19.