¿Te sientes triste frecuentemente, con ansiedad, cambios drásticos de humor, decaído, sin ganas de hacer cosas que habitualmente te gustaban hacer?, pues estos son solo algunos síntomas de la distimia, un trastorno relacionado con la depresión que no afecta las actividades diarias, pero que sí debe de tratarse a tiempo. Además, durante la pandemia varias personas la están registrando, pero no van al psicólogo por pena.
En entrevista con este medio, el doctor Guillermo Loaiza Cerón, director del Hospital psiquiátrico "Dr. Rafael Serrano" explicó que la distimia es una condición del estado de ánimo, se encuentra clasificada dentro de los trastornos afectivos y emocionales.
¿QUÉ ES LA DISTIMIA?
Es un trastorno en donde hay un estado de tristeza en el paciente, pero no tan grande como en una depresión mayor, es decir, el paciente distimico tiene un estado de tristeza emocional, un estado de inconformidad, un estado enojado, pero que pese a todo esto es funcional. Trabaja, hace actividades cotidianas, pero estas actividades las hace triste o con descontento.
Una persona con distimia se siente insatisfecha, los problemas pequeños los suele hacer grandes, está desmotivado, pero a diferencia de las personas con depresión grave, no suelen pensar en quitarse la vida.
SI bien, todos en algún momento hemos sentido estos síntomas, el distimico suele hacerlo de manera frecuente y si no trata estos síntomas se pueden hacer más crónicos.
¿CUÁLES SON LAS CAUSAS DE LA DISTIMIA?
Lamentablemente no hay una causa en específico, es multifactorial, es un trastorno afectivo y no hay un origen único, frecuentemente son factores hereditarios, así como genéticos en donde los padres tuvieron algún caso de depresión, trastorno de bipolaridad o ansiedad.
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Además, también hay factores sociales y emocionales de cada sujeto como su entorno, sus amistades, las situaciones que viven día con día, pérdidas, relaciones amorosas, todo esto puede hacer que la distimia se presente.
¿CÓMO SE TRATA LA DISTIMIA?
El especialista recomienda acudir a un servicio de salud mental, ya sea de psicología o de psiquiatría, puede ser que a nivel de psicología sólo se necesite terapia, pero los médicos determinarán si es necesario un tratamiento psicofarmacológico, ya que algunos fármacos regulan el comportamiento cerebral para que el paciente mejore. Los tratamientos son de casi un año para que el paciente vuelva a ser el mismo de antes.
Además de comer sano, hacer actividad física y encontrar un hobbie o una distracción. Rodearse de amigo, familiares y tener un grupo de apoyo.
A QUIÉN AFECTA MÁS Y POBLACIÓN EN PUEBLA CON DEPRESIÓN
Los trastornos del afecto les dan principalmente a mujeres, por ejemplo, la depresión le da a 3 mujeres y a 1 hombre, hay muchas teorías de esta situación, como la de cromosomas XX, pero también los factores hormonales y psicosociales, ya que las mujeres siguen teniendo más presión por parte de la sociedad. Estos trastornos afectivos se presentan aproximadamente del 14 al 17 por ciento en la población en general de Puebla y la distima es en un 5 a un 8 por ciento.
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Por esta situación, Loaiza hizo un llamado a la población para acudir al médico, ya que desgraciadamente muchas personas siguen viendo como tabú las enfermedades mentales y no las atienden por miedo, pena o porque creen que los llamarán “locos”.
“Siguen muchos estereotipos y prejuicios, suelen creer que si una persona tiene depresión no es funcional o es peligrosa, pero no es así, las personas se hacen ideas erróneas de los que llevan tratamientos psicológicos y este estigma debe de disminuir y en esa disminución podemos intentar que la población tenga más acercamiento a los servicios de salud mental”, agregó.
Para finalizar, confirmó que este tipo de casos se han registrado con más frecuencia en la pandemia, ya que el encierro y el sentimiento de incertidumbre ante esta enfermedad disparó los pensamientos negativos. De ahí la importancia de acudir a terapia para que este trastorno sea tratado y no afecte al paciente, a sus familiares, ni a su entorno.