Diversas actividades que consideramos como cotidianas suelen ser utilizadas como una terapia para atender múltiples padecimientos, pues se han encontrado los efectos que tienen en la psique y la música no podía ser la excepción, por lo que recientemente la Universidad de Bochum de Alemania optó por analizar diferentes géneros musicales y sus efectos en el corazón.
Pues cuantas personas no eligen una determinada melodía para aliviar un día de estrés, actividad en la que influye el flujo sanguíneo, el cual parte de este importante músculo, por lo que este trabajo se centró en los efectos que algunos tipos de música tienen en su salud, esto con base en la presión arterial y la frecuencia cardiaca al percibir determinadas pistas.
¿Cómo repercute la música a la salud del corazón?
El trabajo constó en comparar piezas de Mozart y Strauss frente a temas de ABBA, con lo que se pudo determinar que, mientras la música clásica beneficiaba tuvo efectos positivos en los dos valores medidos, la que era tocada por el grupo de los setentas tenía un efecto contrario, aunque esto no fue definitorio para todos los temas del pop, pues ambos repercutieron en los niveles de cortisol.
Aunque si bien ambos géneros tuvieron un efecto calmante la que mayores resultados arrojó fue la Sinfonía nº 40 en sol menor del austriaco, pues de acuerdo con los expertos el mayor beneficio de escuchar música radica en que genera efectos calmantes en el sistema cardiovascular, cuya resistencia al estrés es mayor, proceso que comienza en el tronco encefálico.
Esta zona es la encargada de controlar la frecuencia de los latidos del corazón y la respiración, relación que podría explicar el hecho de que la música relajante disminuya la frecuencia cardíaca, la respiratoria y la presión arterial, además de aliviar otros malestares como el dolor, el estrés y la ansiedad, lo cual ha sido confirmado con estudios que se han recopilado desde el 2012.
¿Cuáles son los beneficios de la música en la salud?
Debido a sus propiedades, la música puede ser utilizada para la protección de la salud, tanto a manera de prevención como tratamiento ante un episodio patológico, esto mediante la mejora de las redes neuronales, reduciendo la concentración de las hormonas del estrés, pudiendo incluso mitigar las consecuencias de infartos e ictus, manteniendo sano al corazón.
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Otro de los beneficios también radica en el hecho de que mejora el estado de ánimo y reduce el estrés mediante la producción de dopamina, controlando la ansiedad y la depresión, además de que estimula los recuerdos beneficiando el combate en enfermedades como de Alzheimer o la demencia mediante la musicoterapia
Finalmente, la intensidad el dolor también puede reducir de manera significativa con la música e incluso puede ayudar a comer menos mediante la reproducción de música suave de fondo durante la comida, lo cual contribuye a reducir la velocidad y la cantidad de alimentos que se ingieren, además de aumentar la resistencia física del entrenamiento.