El rey Carlos lll del Reino Unido este viernes fue sometido a una intervención para tratar un agrandamiento de la próstata y, de acuerdo a lo informado por los medios británicos, se encuentra en buen estado tras haber sido sometido a dicho procedimiento médico.
Fue la mañana de este 26 de enero, cuando el jefe de Estado ingresó en el hospital London Clinic, en el centro de Londres, acompañado de su esposa, la reina Camila, mismo donde la semana pasada también fue operada su nuera Catalina, princesa de Gales, para recibir un “tratamiento planificado”, según dio a conocer el Palacio de Buckingham.
Según lo comunicado por la prensa británica, al filo de las 15:15 GMT, el rey Carlos lll salió de cirugía con aparente buen ánimo y sonriente, sin dar declaraciones a los periodistas, por lo que según dijeron fuentes no identificadas a la BBC, el monarca se encuentra bien y pasará al menos una noche en el hospital.
“Su Majestad quiere agradecer a todos aquellos que han enviado sus buenos deseos durante la última semana y está encantando de conocer que su diagnóstico está teniendo un impacto positivo en la conciencia ciudadana sobre la salud”, señaló el Palacio de Buckingham en un comunicado.
Asimismo, una portavoz del primer ministro, Rishi Sunak, comunicó a los medios que el jefe de Gobierno ha transmitido al monarca sus mejores deseos y su confianza en una rápida recuperación.
Es importante señalar que fue el pasado 17 de enero, cuando Buckingham informó que el rey Carlos III se sometería a un tratamiento esta semana para un agrandamiento de próstata “benigno”, sin detallar la fecha, además de que “los compromisos públicos del rey de 75 años de edad, se pospondrán durante un breve periodo de recuperación”.
¿Qué es y cuáles son los síntomas de la afección de la próstata que padece el Rey Carlos lll?
Para entender un poco el término, es importante saber que la próstata es una pequeña glándula que ayuda a producir el semen, misma que se encuentra justo debajo de la vejiga y a menudo aumenta de tamaño a medida que envejeces.
En este sentido, según el portal de Medine Plus, un agrandamiento de la próstata significa que la glándula se ha vuelto más grande y le sucede a casi todos los hombres cuando van envejeciendo. A dicho agrandamiento de la próstata generalmente se le llama hiperplasia prostática benigna (HPB), un padecimiento que no es un cáncer y no aumenta el riesgo de cáncer de próstata.
Es así como, de acuerdo con la Clínica Mayo, la hiperplasia prostática benigna puede causar síntomas molestos, como bloquear el flujo de orina desde la vejiga, además de que puede causar problemas en la vejiga, las vías urinarias o los riñones.
Entre los síntomas frecuentes de la hiperplasia prostática benigna incluyen los siguientes:
- Necesidad de orinar frecuentemente (micción frecuente) o con urgencia. Esto suele ocurrir más por la noche
- Dificultad para comenzar a orinar
- Flujo de orina débil o que se detiene y vuelve a comenzar
- Goteo después de la micción
- No poder vaciar completamente la vejiga
Asimismo, los síntomas menos comunes incluyen los siguientes:
- Infección de las vías urinarias
- Incapacidad para orinar
- Sangre en la orina
Por otra parte, de acuerdo con la Clínica Mayo de los Estados Unidos, los factores de riesgo para el desarrollo de la hiperplasia de la próstata son:
Envejecimiento
Antecedentes familiares
Diabetes y enfermedades cardíacas
Estilo de vida