Seguro has tenido alguna reacción alérgica a algún alimento y te han recomendado el consumo de loratadina para aliviar este malestar, pero esta no es la única función que tiene este fármaco, además de que al ser un producto médico tampoco es recomendable consumirlo sin medida.
Este medicamento se usa principalmente para aliviar de forma temporal los síntomas de la rinitis alérgica, también conocida como fiebre del heno, aunque también surte efecto contra otros tipos de alergias.
Es un antihistamínico que tiene como función el bloquear la histamina, que es la responsable de provocar las manifestaciones físicas de las alergias, mientras que cuando se combina con peseudofedrina, puede ser útil para aliviar las molestias del resfriado común.
¿CUÁL ES LA DOSIS MÁXIMA DE LORATADINA EN ADULTOS?
Sobre el proceso para la toma de este fármaco especialistas de la UNAM señalan que, en adultos o menores con un peso mayor a los 30 kg, la dosis es de una tableta de 10 mg al día.
Mientras que en caso de los menores de entre 2 a 12 años con un peso igual o menor a los 30 kg, la recomendación es el consumo de este medicamento en jarabe, con una cantidad de 5 ml al día, quedando prohibido el uso de comprimidos de 10 mg.
Sobre su consumo, en caso de olvidar su toma en alguna hora, lo recomendable es retomar la dosis en cuanto el paciente ser percate, a excepción de que se acerque lo hora de la siguiente toma, evitando en todo momento doblar la cantidad.
Pese a que este medicamento es para combatir alergias, también hay quienes no pueden consumirlo pues puede perjudicar su salud en otros ámbitos, tal es el caso de personas con hipersensibilidad a la loratadina o medicamentos similares, menores de 2 años, así como mujeres embarazadas y en periodo de lactancia.
¿QUÉ EFECTOS SECUNDARIOS PUEDE TENER LA LORATADINA?
Algunos de los malestares tras la ingesta de este fármaco pueden ser dolor de cabeza, somnolencia, fatiga, resequedad de boca e incluso dificultad para dormir.
En el caso de los más pequeños algunos pueden presentar nerviosismo, sibilancias, fatiga, hipercinesia, dolor abdominal, conjuntivitis, disfonía y malestar general.
Cabe señalar que, si los síntomas son graves o en mayor magnitud como sangrado por la nariz, llagas el a boca, debilidad, enrojecimiento o comezón en los ojos, sarpullido, urticaria, inflamación en alguna parte del cuerpo o dificultad para respirar se debe suspender su ingesta y acudir al médico.
Finalmente hay que destacar que además de tomar loratadina, el paciente debe limitar la exposición a lo que causa la alergia y si los síntomas no mejoran posiblemente requerir otro medicamento bajo prescripción médica.