¿Sabías que el secreto para evitar enfermedades como la demencia o el Alzheimer y mantener la mente ágil, es nutriendo la Reserva Cognitiva? Pero, qué es y cómo nos protege del deterioro cognitivo, en esta nota te lo explicamos.
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Sin duda alguna, una de las principales claves para favorecer la salud cerebral es mantenerse cognitivamente activos a lo largo de toda la vida, esto debido a que el cerebro, al igual que todos los órganos del cuerpo, también acusa el paso de los años y el envejecimiento repercute en las neuronas. En este sentido, una alta Reserva Cognitiva puede ser un buen aliado para contrarrestar su efecto.
¿Qué es la Reserva Cognitiva?
El término de Reserva Cerebral o Reserva Cognitiva, según el Centro de Diagnóstico e Intervención Neurocognitiva (CDINC) de Barcelona, nace como “un modelo para poder explicar una parte de las diferencias que se observan en las manifestaciones clínicas entre personas con un mismo grado de daño cerebral”.
Y es que, de acuerdo con la Fundación Pasqual Maragall, la acumulación de las experiencias, tanto en el tema de educación o académico, así como la estimulación de las capacidades mentales a lo largo de la vida se reflejan en lo que se llama Reserva Cognitiva.
En este sentido, se puede definir al término como la capacidad que tiene el cerebro de tolerar los cambios, ya sean consecuencia de alguna enfermedad neurodegenerativa, el daño cerebral adquirido, como por el propio envejecimiento.
Es así como, Reserva Cognitiva, es la forma en la que los especialistas se refieren a la capacidad que tiene el Sistema Nervioso Central para hacer frente a este tipo de efectos.
¿Por qué es importante nutrir la Reserva Cognitiva?
Si bien, es imposible decir que la Reserva Cognitiva actúa como un antídoto para prevenir enfermedades cerebrales, así como que también evita el envejecimiento neuronal, lo cierto es que es un factor que contribuye a retrasar el posible deterioro cognitivo, promoviendo una red neuronal más resistente.
De esta manera, algunos científicos analizaron los cerebros de un grupo de personas y encontraron cambios propios de haber padecido Alzheimer avanzado, a pesar de que, en vida, ninguno de ellos había demostrado síntomas de la enfermedad, pero ¿cuál fue el motivo?
“Tenían una reserva cognitiva lo suficientemente grande como para compensar el daño y continuar funcionando como de costumbre”, señaló Harvard Health Publishing, la publicación de la Escuela de Medicina de Harvard en el artículo “What is cognitive reserve?”
Incluso, otras investigaciones han llegado a demostrar que las personas con una mayor Reserva Cognitiva pueden evitar con mayor eficiencia los síntomas de los cambios cerebrales degenerativos asociados con la demencia u otras enfermedades cerebrales, como el Parkinson, la esclerosis múltiple o un accidente cerebrovascular.
En este sentido, la más reciente investigación sugiere que el realizar estilos de vida saludables pueden ayudar a evitar la demencia, quizá mediante la creación de esta Reserva Cognitiva resistente en el cerebro que envejece.
Según el estudio realizado por los investigadores se basó en las autopsias cerebrales de 586 personas, a quienes se les comparó el estilo de vida y las habilidades mentales al final de la vida de cada uno con sus signos neurológicos de demencia, como las placas de proteínas cerebrales o los cambios en el flujo sanguíneo cerebral.
De acuerdo a lo señalado por un equipo dirigido por el Dr. Klodian Dhana, del Centro Médico de la Universidad de Rush, en Chicago, todo parece indicar que ninguno de esos factores cerebrales pareció afectar en gran medida a la conexión positiva entre una vida saludable y las habilidades mentales de una persona al final de la vida, lo que significa que una buena nutrición, el ejercicio regular y otros factores podrían “proveer una reserva cognitiva” que amortigüe los cambios negativos que ocurren en el cerebro, lo que permite a las personas mayores “mantener las capacidades cognitivas” a lo largo del tiempo, señalaron los investigadores.
Actividades diarias para aumentar la Reserva Cognitiva
Si bien, no existe ninguna actividad concreta ni ejercicios específicamente recomendados para evitar o reducir el riesgo de sufrir demencia, sí existe una serie de prácticas muy recomendables para mantener activo el cerebro y favorecer la reserva cognitiva.
En este sentido, se recomienda procurar mantener actividades y aprender algunas que sean nuevas para nosotros o plantearnos pequeños retos diarios que nos obliguen a realizar cierto esfuerzo mental, pues mantener activo nuestro cerebro nos ayudará a aumentar la Reserva Cognitiva y estas son algunas que puedes realizar diariamente para aumentarla:
- Leer a diario
- Jugar con actividades físicas o mentales
- Aprender cosas nuevas
- Ponerse a prueba con retos
- Cambiar rutinas
- Mantener una vida socialmente activa
- Ocio
