Quien no recuerda las palabras de los padres o abuelos que afirmaban que durante la niñez y adolescencia es necesario tomar leche, por encima de otras bebidas, esto con la intensión de fortalecer los huesos, entre otras partes del organismo, por lo que incluso hay personas que pese a estar en la edad adulta mantienen su consumo de lácteos con el paso de los años.
Sin embargo, si bien este líquido si tiene beneficios para la salud, su consumo en exceso también puede resultar dañino e incluso generar efectos secundarios para quien los consume, es por ello que si eres de los que disfruta del consumo de este producto, aquí te traemos lo que dicen los expertos de la salud acerca de su ingesta, además de la explicación del origen de estos efectos.
¿Cuáles son los beneficios del consumo de leche?
Aunque existen distintos tipos, el más común es el que es considerado como un fluido biológico que es segregado por las hembras de los mamíferos, el cual tiene la función de aportar nutrientes y energía que son necesarios para el crecimiento y desarrollo de las crías durante sus primeros meses de vida, por lo que incluso es considerado como un alimento básico en estas etapas.
Dentro de los beneficios que tiene, la leche aporta proteínas con un alto valor biológico, además de hidratos de carbono, e incluso grasas y minerales como calcio, magnesio, fósforo y zinc, así como vitaminas D, A y complejo B, es por ello que diversos expertos recomiendan que este alimento forme parte de la dieta diaria para generar una mejorar considerable del organismo.
Incluso algunos especialistas han recomendado que, por el contenido de grasa o lactosa, se sustituya la leche de vaca por la vegetal, pues no contiene colesterol y es saludable para el organismo, además de que incluso se le asocia con la posibilidad de bajar de peso rápidamente, además de prevenir enfermedades de los huesos como la osteoporosis, además del colesterol o la diabetes.
¿Qué puntos negativos tiene el consumo diario de leche?
Por su parte hay expertos que afirman que contrario a lo que siempre se ha pensado la leche no es del todo benéfica, esto sumado al hecho de que la mayoría de la población es sensible a los lácteos, por lo que su consumo diario puede generar efectos secundarios, uno de estos males son náuseas debido a la intolerancia a la lactosa e incluso en casos extremos desencadenar vómito.
Otro de los malestares que puede desencadenar su consumo es la distensión abdominal y malestar digestivo, lo cual tiene su origen nuevamente en los problemas para descomponer la lactosa cuando viaja a través del sistema digestivo y es degradada por las bacterias intestinales; también se puede originar la aparición de acné, pues es un producto con hormonas y, en caso de ya padecerlo, el problema puede empeorar.
Finalmente, algunos estudios han podido determinar que con un consumo diario de este producto también se puede incrementar el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, como lo son el de próstata y el de mama, pese a que también se ha demostrado que puede reducir el riesgo de padecer otros males de este tipo, como el cáncer de colon.