El trastorno de déficit de atención con hiperactividad es un trastorno del desarrollo caracterizado por la falta de atención, hiperactividad o impulsividad, estos síntomas pueden interferir en las actividades y relaciones diarias de quienes la padecen.
De acuerdo con datos de Instituto Nacional de la Salud Mental (NIH), este trastorno puede iniciar en la niñez y seguir hasta la adolescencia, en casos particulares, continúa con el paciente hasta la edad adulta, además se estima que entre el 5 y 7% de población infantil lo padece.
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Es por eso que cada 13 de julio se conmemora el Día Internacional del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), pues se busca sensibilizar a la población y así apoyar a quienes lo padecen y a sus familiares.
¿Cuáles son los síntomas del TDAH?
Los principales síntomas del trastorno son la falta de atención, hiperactividad e impulsividad, teniendo como síntoma más común la primera en la lista, estos pueden incluir signos diferentes.
- Falta de atención: No presta atención a detalles y pueden ser vistos como descuido, le es difícil mantener la atención en los juegos y las tareas, dificultad para seguir las instrucciones o terminar las tareas escolares o los quehaceres del hogar, evita las tareas que requieran un esfuerzo mental sostenido, se distrae fácilmente con pensamientos o estímulos no relacionados y suele ser olvidadizo durante las actividades diaria.
- Hiperactividad e impulsividad: Se mueve mientras está sentado, se mueve constantemente cuando debería permanecer sentado, está constantemente en movimiento, habla en exceso, además que suele interrumpir a otros.
¿Cómo se diagnostica?
Al ser un trastorno propio de la niñez, para el diagnóstico, el paciente tuvo que haber presentado síntomas antes de los 12 años, en edades hasta antes de los 16 se les diagnostica si han tenido al menos seis síntomas de falta de atención o seis síntomas de hiperactividad e impulsividad persistentes durante seis meses. Además, la conducta se debe presentar en dos o más entornos como la escuela, casa, amigos, etc.
Si el menor presenta algún síntoma será necesario acudir con el medico especialista, psicólogo o psiquiatra en este caso, para que realice los estudios necesarios; algunos síntomas pueden confundirse con los presentados por los trastornos del sueño, la ansiedad o la depresión, por lo que es importante poder diferéncialos.
¿Cómo tratarlo?
Desgraciadamente no existe un cura para el TDAH, sin embargo, se cuenta con varios tratamientos que han resultado eficaces para reducir sus síntomas como los medicamentos, las terapias e intervenciones psicosociales.
En el caso de los medicamentos, si bien han demostrado ser eficaces, cuentan con efectos secundarios como otros fármacos, esto dependerá del paciente y se podrán modificar o sustituir como indique el especialista.
En el caso de las terapias existen tres tipos, terapia conductual, terapia cognitivo-conductual y la terapia de familia y de pareja, cualquiera que se lleve a cabo requiere que los familiares cercanos desempeñen una función activa para la mejora del paciente con trastorno de déficit de atención e hiperactividad.
