Un vendedor fue captado en el momento preciso en el que estaba en su puesto vendiendo melones, pero no se percató que era grabado mientras partía un melón y lo lamía, posteriormente lo acomodó para la venta.
“Puro del rico, pásale” decía el comerciante que acababa de probar la fruta y la ponía a la venta.
Los comentarios de los usuarios no se hicieron esperar, algunos mencionaron su desaprobación y la falta de higiene del vendedor, otros a modo de sarcasmo mencionaron que era una forma de garantizar la calidad del producto.