La industria de reuniones y convenciones es una actividad productiva dentro del sector turístico que fue olvidada en el proceso de reactivación económica que vino después de la pandemia por Covid-19. Tanto la iniciativa privada como las autoridades gubernamentales dejaron de promocionar al estado de Puebla como un destino para llevar a cabo congresos, conferencias, viajes empresariales, ferias y exposiciones.
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La indiferencia para retomar esta actividad deriva de la falta de conocimiento, pues quienes tendrían que trabajar en ello no entienden la importancia que tiene y se han enfocado exclusivamente en promover el turismo de placer, el cual genera hasta tres veces menos de derrama económica, revelan especialistas consultados por El Sol de Puebla.
Ante este panorama, integrantes del sector empresarial proponen la creación de una oficina de promoción, que sea encargada de dar a conocer todas las ventajas que tiene el estado para la realización de convenciones.
Leonardo Ortiz González, presidente del consejo de promoción Puebla Vive, así como de la Asociación Mexicana de Agencias de Viaje (AMAV), expone que, a cuatro años de la emergencia sanitaria, la celebración de convenciones en Puebla registra una disminución de 72.3 por ciento, pues mientras en 2019 se realizaron 36 eventos de gran magnitud, para 2023 solo fueron 10.
Esta situación hizo que la entidad poblana dejara de ser el cuarto lugar nacional como uno de los sitios con mayor importancia para las convenciones y que se fuera hasta la novena posición.
Ahora se ubica por detrás de la Ciudad de México, Nuevo León, Jalisco, Yucatán, Querétaro, Guanajuato, Sinaloa y Quintana Roo, donde autoridades y empresarios del sector le han apostado fuerte a esta actividad.
“La industria ha venido a la baja después de la pandemia y no se ha podido reponer. Aquí el problema principal es que no hemos hecho lo suficiente para promocionar a nuestro estado en este tipo de eventos, pues se han enfocado únicamente en el turismo de placer, el cual también tiene su mérito, pero no genera tantos beneficios económicos”, subraya.
El empresario recuerda que antes de la emergencia sanitaria Puebla se distinguía y caracterizaba a nivel nacional por realizar grandes convenciones, la mayoría de ellas con una capacidad superior a cuatro mil personas, pues se trataba de eventos deportivos, médicos, de autotransporte, de abarrotes y petroleros, entre otros.
Hoy la situación es diferente, pues los pocos congresos que se realizan solo logran reunir a 500 visitantes, principalmente debido a que los temas que se abordan y la calidad de los eventos ya no son tan atractivos.
“Se ha olvidado la industria de reuniones, no hay promoción y eso se refleja con estas cifras que no son nada alentadoras. Puebla viene a la baja en este tema, ya no tenemos esos magnos eventos”, subraya.
No se comprende la importancia económica de la industria
De acuerdo con Aarón Ochoa Rodríguez, presidente del consejo de promoción Vive Puebla, la falta de promoción para la industria de reuniones y convenciones se debe a que nadie ha entendido su importancia económica.
El directivo explica que el sector turístico genera alrededor del 8.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del estado, del cual, el 5.0 por ciento es aportado únicamente por los congresos.
Incluso, la derrama económica que genera llega a ser hasta tres veces más alta que el turismo de placer, pues cada persona que viaja para una reunión gasta de 2 mil 500 a 4 mil pesos diarios, mientras que el otro grupo que busca una distracción o diversión solo destina de 700 a mil 200 pesos, y realiza estancias más cortas.
“Esta industria es muy grande y pocos lo han entendido. En términos económicos, la diferencia entre la industria de reuniones y el turismo de placer es muy grande e incomparable. En uno, el objetivo es hacer negocios, mientras que en el otro solo es visitar un lugar (…) Puedo decir que en muchas ocasiones un turista solo viene de entrada por salida y el congresista se queda y genera una mayor inversión”, expone.
El entrevistado concluyó advirtiendo que la realización de eventos impacta positivamente en otros rubros productivos, ya que aumenta los ingresos del comercio, hoteles, restaurantes y transportes.
¿Cuáles son los recintos más importantes de Puebla para reuniones?
Luis Javier Cué, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico, comenta que el territorio poblano tiene todo para seguir siendo referencia nacional en la industria de reuniones y convenciones.
Uno de sus elementos positivos es que cuenta con un total de 41 espacios para la realización de este tipo de eventos, los cuales tienen en conjunto una capacidad promedio para 90 mil personas, lo que representaría llenar casi dos veces el Estadio Cuauhtémoc, que es para 51 mil.
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Entre los recintos más importantes están el Centro Expositor, el Centro de Convenciones, el Auditorio del Complejo Cultural Universitario (CCU), el Auditorio GNP, el Auditorio Metropolitano, así como teatros, salones privados en hoteles y otros recintos que se ubican al interior de universidades tanto públicas como privadas.
Otra de las fortalezas de Puebla es la ubicación, la cual es considerada como estratégica, pues se encuentra a solo dos horas de la Ciudad de México y está en medio del norte y sur del país, por lo que su conectividad es única.
Además, la entidad cuenta con más de 13 mil cuartos de hotel, establecimientos en la plataforma Airbnb, un aeropuerto y dos terminales de autobuses –la CAPU y Paseo Destino– con salidas y entradas a casi toda la República Mexicana.
“Estamos sobrados en cuestión de oferta de servicios, tenemos todo y de todo para que podamos regresar a ser una referencia en el sector. El único problema es la falta de promoción, pero eso se erradica con voluntad de todos”, alienta.
Una oficina de promoción
Ante la difícil situación por la que atraviesa la industria de reuniones, Manuel Domínguez Gabián, presidente de la Asociación Poblana de Hoteles y Moteles, propone la creación de una oficina de promoción.
Agrega que debe estar integrada por funcionarios públicos, cámaras empresariales, tour operadores, agencias de viajes y otros prestadores de servicios, quienes se dediquen exclusivamente a promover la entidad a nivel nacional e internacional para la realización de eventos.
“Que el objetivo sea traer convenciones a través de la promoción, pues debemos mostrar todas las virtudes que tenemos en Puebla. Solo necesitamos la voluntad política y empresarial, pues lo único que nos está faltando es una buena organización y una estructura de promoción que esté compuesta por expertos y vendedores de nuestro destino”, declara.
El empresario explica que esta es una iniciativa que ya se ejecuta en otros estados del país, principalmente en aquellos destinos que se encuentran en el top cinco como los principales realizadores de congresos.
Otra solución para reactivar a la industria, sería que la entidad realice sus propios eventos locales con fideicomisos mixtos, es decir, que el capital sea público y privado.
“Tenemos con qué organizar nuestros propios foros, pues contamos con sectores bien establecidos y consolidados, como es el automotriz, el de autopartes, el textil, de alimentos, el químico, por mencionar solo algunos. Un claro ejemplo es la exhibición internacional EXINTEX, la cual es un punto de encuentro entre proveedores y compradores de la industria textil. Esta exposición solo es una pequeña probadita de lo que podemos hacer en Puebla, pues esa feria ha tenido éxito, ha concentrado a miles de personas y ha generado una buena derrama económica”, concluye.
