La actividad industrial del estado de Puebla cerró el 2022 con un nivel del -10.7 por ciento respecto a lo registrado en el 2019, es decir, antes de la pandemia por la Covid-19.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), hace tres años la entidad tuvo un índice en el indicador del 120.1, mientras que la cifra actual fue de 107.3.
Este déficit se debe a que los cuatro sectores que comprenden la actividad industrial poblana, no han podido recuperar sus niveles de productividad, después del impacto económico generado por la emergencia sanitaria.
Los más afectados es la construcción, pues presenta una caída productiva del -37.5 por ciento; al pasar de 135.4 a 84.7; así como la minería, con un -23.8 por ciento, pues pasó de 47.9 a 36.5.
Le sigue la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, agua y gas, con una contracción del -14.8 por ciento, al pasar de 113.2 a 96.5; y la industria manufacturera, con un -2.2 por ciento, de 123.7 a 121.0.
Según el instituto, la actividad industrial se ve afectada por factores estacionales, es decir, efectos periódicos que se repiten cada año y cuyas causas son ajenas a la naturaleza económica de las series.
Estas pueden ser las festividades, meses más largos que otros, las vacaciones escolares, el clima y otras fluctuaciones estacionales como la elevada producción de juguetes en los meses previos a la Navidad.