Los especialistas en finanzas consideran que el ahorro es una práctica fundamental para alcanzar una estabilidad financiera. Este hábito puede ser una herramienta crucial para afrontar imprevistos y planificar el futuro. Por ese motivo, se debe buscar la forma de almacenar dinero de forma constante.
Esta práctica no solo implica reservar una parte de los ingresos, sino también adoptar decisiones conscientes y responsables en el consumo diario. Por ese motivo, algunas instituciones promueven la educación en esta área como un medio para que ser consumidores informados compren, se evite el endeudamiento y se hagan compras inteligentes.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha emitido diferentes recomendaciones para ayudar a la ciudadanía a mejorar sus habilidades financieras y que se vuelvan sostenibles. A continuación te hablaremos de una táctica con la que podrás cumplir con este objetivo sin tener tantas complicaciones.
¿Cómo funciona el "ahorro hormiga"?
El término ‘ahorro hormiga’ se refiere a la práctica de reservar pequeñas cantidades de dinero periódicamente, con el objetivo de acumular un fondo financiero a largo plazo. Este método, aparentemente simple, es una estrategia efectiva para alcanzar metas sencillas.
Se caracteriza por destinar una fracción de los ingresos, incluso los más pequeños, para guardarlos en un lugar seguro, como una alcancía, una cuenta de ahorros o un frasco. Estas contribuciones, que podrían parecer pocas, con el paso del tiempo pueden generar una cantidad significativa.
Una de sus ventajas es la accesibilidad, pues no requiere grandes sacrificios ni cambios drásticos en el estilo de vida. Por el contrario, se basa en hábitos simples y cotidianos, como en guardar el cambio sobrante, renunciar a ciertas compras como de golosinas o destinar una parte del sueldo.
Todo lo que se junte puede tener distintos fines, como a corto plazo, tal es el caso de pagar unas vacaciones o un nuevo celular, aunque también se puede guardar por mucho tiempo y al final usarlo para adquisiciones más importantes.
¿Cómo funciona este hábito?
Esta práctica se puede poner en marcha si se ahorran cantidades pequeñas, aunque por lo regular hay quien decide fijar un monto mínimo de 10 pesos diarios, pero la flexibilidad de este ahorro da la opción de guardar cualquier otra cifra.
La Profeco señaló que es válido optar por 50, 20, 10, 5 e incluso 1 peso, ya que lo importante es que se cumpla con esta meta del diario, sin importar de cuánto se trate. Esto es lo que podrías obtener después de dos años:
- 50 pesos diarios: 36 mil pesos
- 20 pesos diarios: 14 mil 400 pesos
- 10 pesos diarios: 7 mil 200 pesos
- 5 pesos diarios: 3 mil 600 pesos
- 1 peso diario: 720 pesos