Para el segundo semestre del 2022, se espera que aumente la crisis económica en el estado de Puebla, ya que se combinarán factores como la inflación, mercado laboral frágil, pobreza y un bajo crecimiento en el Producto Interno Bruto (PIB).

Marcos Felipe Gutiérrez Barrón, catedrático de la Facultad de Economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), explicó que todos estos problemas afectarán directamente la economía familiar, pues perderán su poder adquisitivo.

El experto precisó que se tiene previsto este panorama para la entidad, debido a que su principal actividad, la industria manufacturera, está desacelerando su producción a raíz de la pandemia y por el desabasto de materiales indispensables para realizar sus respectivos procesos.

Además, mencionó que otro factor será el tema de la inflación, la cual continúa creciendo y alcanzando niveles nunca antes vistos en los últimos 20 años, por lo que este indicador podría terminar el 2022 con un índice cercano al 8 por ciento.

Por si fuera poco, precisó que en el tema del mercado laboral, este lleva cuatro meses consecutivos con un lento crecimiento, por lo que no se proyecta un alto índice de generación de empleos, dando como resultado que la mayoría podría optar por un trabajo informal.

“En el último semestre habrá una desaceleración económica importante y evidente en Puebla, lo que generará afectaciones muy graves en todas las familias (…) Todo esto será consecuencia de la inflación, un mercado laboral frágil, pobreza y un bajo crecimiento en el PIB”, precisó.

El maestro informó que, una crisis económica más grave, provocará que las familias no tengan el recurso suficiente para satisfacer sus necesidades básicas, por lo que habrá desnutrición, aumento de enfermedades y menor consumo.