El debate sobre si una jornada laboral más corta sería más productiva, tiene abierto desde tiempo antes de la pandemia, tal es la relevancia que tiene el tema que no sólo se ha hablado sobre horas laboradas, sino también en cuanto a días trabajados.
En algunos países incluso la discusión ya salió de las esferas sindicales y empresariales para pasar a las esferas políticas a fin de poner a prueba los beneficios.
Cabe señalar que este fundamento proviene de que los países que más horas dedican al trabajo son justo en los que menos eficiencia muestran sus empleados.
De acuerdo con los especialistas, la calidad de vida de los trabajadores es mejor, al sentir que dedican más horas al descanso, cuidado de sus seres queridos, al ocio e incluso al tiempo libre.
En contraste, quienes están en contra señalan que el disminuir las horas laborales traería consigo una disminución en la remuneración, misma que afectará los niveles de ahorro y consumo de las familias.
En lo que corresponde a las compañías, los expertos apuntan a que una reducción gradual de las horas laborales, serán sólo pocas compañías las que podrían resultar afectadas, principalmente las que se relacionan de manera directa con el trabajo de oficina.
Sobre sectores como el del transporte o los servicios, esta adaptación podría tener un proceso más lento, pues dependen de una mayor cantidad de personal físico.
¿EL HOME OFFICE SIRVIÓ DE EXPERIMENTO?
Algunos especialistas afirman que el home office obligado por la pandemia, demostró a diversas empresas que es posible funcionar de una mejor manera con un ritmo de trabajo de menos presión, mismo que va de la mano con una posible modificación en el ritmo laboral futuro.
Dicho experimento obligado, también sirvió para demostrar que una jornada completa actualmente resulta antigua, pues tiene más de 80 años que se implementó en el mundo y aunque en su momento resultó revolucionario, actualmente dejó de serlo.
Y tú, ¿qué opinas acerca de una jornada laboral con menor cantidad de horas o incluso días?