Familias enteras, parejas y grupos de amigos, haciendo compras, comiendo o simplemente paseando, fueron una constante hoy en centros comerciales, restaurantes y zonas de fast food, luego de que la Secretaría de Economía diera a conocer la reapertura de los mismos en día domingo.
Las plazas, comercios y comedores regresaron a la vida en fin de semana; caminatas tomados de la mano, comidas en familia, compras y gustos discretos, es lo que nuevamente pudieron hacer cientos de poblanos este primer domingo de actividad formal tras seis meses de parálisis por el coronavirus.
En un recorrido realizado por este medio, se pudo notar la diferencia de la afluencia, pues se observó como la gente prefiere este día de la semana para salir de la rutina, y compartir con sus seres queridos un rato de esparcimiento a través de las visitas a los centros comerciales de la ciudad.
A pesar de que muchos lucieron más concurridos de lo habitual, lo cierto es que las necesidades variaron dependiendo de la zona.
En Angelópolis Lifestyle Center las compras en tiendas de ropa y zapaterías fueron muy evidentes, pues la mayoría de los asistentes portaban bolsas con sus adquisiciones, mientras que los restaurantes y la zona de fast food lucieron un poco desolados.
Es importante mencionar que, para acceder a la zona de comedor, Angelópolis contó con los protocolos de sanidad debidos, pues toda esa área se encontró acordonada y solo tuvo una entrada y una salida desde la que el personal pudo controlar el acceso. La ocupación del inmobiliario tuvo la suficiente distancia entre uno y otro, además de que las mesas fueron sanitizadas una vez que se desocuparon.
En Parque Puebla, familias y vecinos de la zona aprovecharon la apertura para para pasear y comer en algunos de los restaurantes que la plaza ofrece, principalmente en Chili’s y Costeñito, dos de los lugares cuyas mesas se notaron llenas, a diferencia de otras cadenas que no corrieron con la misma suerte.
Empero a esta situación, la zona de comida rápida se vio casi vacía y sin sillas, únicamente las mesas donde pocas familias aprovecharon para comer sus alimentos, aunque fuera parados. Y es que, de acuerdo a una trabajadora de limpieza, desde que se emitió el cierre por la contingencia, los asientos fueron retirados y no se han vuelto a colocar, esto a pesar de que desde el pasado 7 de agosto se inició con la reapertura económica.
El caso de Plaza Dorada fue totalmente diferente, pues ahí la zona de comedor se vio muy beneficiada por la asistencia de grupos familiares y parejas, mientras que las tiendas y locales de otros giros, se notaron un tanto solitarios. Inclusive el estacionamiento no contó con muchos autos y los restaurantes de la parte de afuera se percibieron con pocas personas.
Lo que, si fue una constante en la mayoría de estos centros comerciales, fue el seguimiento de las indicaciones de sanidad, ya que, en todos, los accesos de entrada y salida estuvieron inspeccionados, además del implemento de tapetes sanitizantes, gel antibacterial y toma de temperatura.
Es importante mencionar que a pesar que éste fue el primer domingo en que los centros comerciales, restaurantes y comercios pudieron abrir, manteniéndose en un 33 por ciento de su aforo y en un horario de 11 a 19 horas, muchos negocios, a pesar de seguir operando, decidieron permanecer aún con las puertas cerradas.
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