Urge diálogo y disposición entre las partes involucradas para resolver favorablemente el estallido de la huelga en la planta de Audi México, situada en el municipio de San José Chiapa, consideró el investigador de la Universidad Iberoamericana Puebla, Miguel Ángel Corona Jiménez, quien refirió que la millonaria pérdida por el paro de labores lastimará la industria automotriz en la entidad y a todos los eslabones comerciales de la misma.
El académico, quien ostenta un doctorado en Organizaciones por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), así como una licenciatura en Economía por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), lamentó que una empresa del rubro automotriz tan importante para el estado, como Audi, haya realizado paro total de actividades.
Según su análisis, la pérdida económica por el cese de la producción, misma que, de acuerdo con el Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi México (Sitaudi), será de casi 750 millones de pesos diarios, impactará negativamente al desempeño de la industria automotriz en Puebla.
“Tenemos que decir que es lamentable, porque está dentro de una de las ramas importantes del aparato productivo poblano, que corresponde a la industria automotriz, y que no solamente es esa empresa, sino toda su red de abastecimiento, en donde hay una gran cantidad de trabajadores”, declaró.
Corona Jiménez consideró que la voluntad al diálogo que los líderes sindicales y representantes de la compañía tengan en las próximas horas será decisiva para poner fin a la huelga, que amenaza la estabilidad financiera de obreros y empresarios por igual.
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El profesor universitario hizo hincapié en que ambas partes deben intensificar los esfuerzos para alcanzar un acuerdo que represente un equilibrio entre los derechos laborales y los intereses de la multinacional.
“Deber haber un diálogo y una disposición mayor, tanto del sindicato como del grupo de empresarios de Audi, para tratar de llegar a un punto de encuentro, en el que puedan aceptar las condiciones, tanto de una como de otra parte (...) Exhortamos a que la empresa haga el mayor de sus esfuerzos por satisfacerla y, por otro lado, también pedirles a los obreros que tengan en cuenta que la empresa tampoco puede tener todos los recursos para satisfacer sus requerimientos; y en una labor de colaboración y cooperación, e ir juntos en este camino de la competencia y competitividad, acepten condiciones moderadas para que la industria automotriz pueda seguir adelante”, comentó.
El académico de la Ibero Puebla remarcó que el paro en la producción de las unidades Q5 de Audi, mismas que son manufacturadas en la planta situada en San José Chiapa, afectará a quienes componen la red de suministros y abastecimiento de la empresa.
Corona Jiménez consideró que la pérdida económica que ocasionará la huelga afectará el crecimiento de la industria automotriz en Puebla y, además, empeorará sus ventajas competitivas frente a otras empresas en México y el mundo en los años venideros.
En otras palabras, el investigador sugirió que, con el crecimiento de la competencia global en el rubro, Audi, así como quienes dependen de su cadena comercial, enfrentarán presiones económicas que debilitarán su desempeño en el futuro próximo. Esta situación, expuso el académico, puede tener graves consecuencias para la economía poblana, pues las empresas pueden relocalizarse eventualmente.
“Estamos viviendo momentos difíciles, porque se ha incrementado la competencia a nivel mundial con la entrada de autos, sobre todo de Asia, y las empresas norteamericanas requieren también niveles altos de producción y eficiencia, y eso se logra, en parte, teniendo en buenas condiciones a sus trabajadores (...) La industria va a enfrentar, en los próximos años, mayor competencia, y con el nearshoring, que seguramente va a beneficiarse por un lado, pero, por otro, aumentará el grado de presiones en el mercado automotriz”, sostuvo.
Por ese motivo, el catedrático de la Ibero Puebla exhortó a la multinacional a esforzarse para flexibilizar la negociación con el Sitaudi. En tanto, a los trabajadores de la empresa les recomendó “aceptar condiciones moderadas para que la industria automotriz siga adelante”.
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Finalmente, cabe recordar que fue este miércoles 24 de enero cuando oficialmente trabajadores sindicalizados estallaron una huelga en la planta de Audi, lo que implica un cese total en la producción de automóviles. Esta determinación se dio luego de que representantes laborales y directivos de la compañía no alcanzaron un acuerdo respecto a la revisión contractual 2024. No hay que olvidar que los obreros exigieron un aumento salarial de 15.5 por ciento, mientras que la multinacional ofreció 6.5 por ciento.