En el 2019 el estado de Puebla ocupó la segunda posición a nivel nacional con un mayor número de niños, niñas y adolescentes trabajando, con 402 mil 600, cifra que representa el 18.3 por ciento del total de ese sector poblacional en el estado.
Lo anterior, de acuerdo a los resultados de la Encuesta Nacional del Trabajo Infantil 2019, realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) enfocado a personas de cinco a 17 años.
Durante un sondeo realizado por este medio de comunicación, se pudo constatar que actualmente los infantes deciden unirse al campo laboral para generar ingresos propios sin depender totalmente de sus padres.
Tal es el caso de Saymon N. de 15 años de edad, quien lleva laborando en diversas actividades desde hace tres años en el mercado del Carmen ubicado en la capital poblana.
“En época decembrinas hago piñatas y me pagan 600 pesos a la semana. (…) Mi horario es de 9 de la mañana a 8 de la noche. (…) Me gusta trabajar porque puedo comprarme mis propias cosas y me hace sentir independiente”, comentó.
El resto del año, Saymon se dedica a trabajar como valet parking, mesero y apoya a la limpieza de un baño de vapor, donde no genera más de 400 pesos a la semana, los cuales debe repartir entre sus ingresos netos y el apoyo a su familia.
Así como él, Luis Antonio N. 17 años empezó a trabajar 20 horas a la semana en un call center para generar sus propios ingresos, y ahora se desempeña realizando actividades de diseño gráfico donde le pagan 800 pesos a la semana.
“Estoy en el proceso de admisión para ingresar a la universidad, pero desde muy pequeño me gusta trabajar porque quiero solventar mis propios gastos y no causarles molestia a mis papás. (…) El salirme de trabajar me cuesta mucho porque no tengo dinero”, mencionó.
Antonio da a conocer que el adentrarse al mundo laboral desde corta edad tiene sus ventajas y desventajas debido a que no se disfruta la vida de la misma manera, pero le ayuda a generar experiencia para su futuro.
LOS TRABAJADORES MENORES DE EDAD NO CUENTAN CON LA EDUCACIÓN BÁSICA CONCLUIDA
El INEGI reporta que del total de los niños, niñas y adolescentes que se encuentran trabajando, un 4.2 por ciento no cuenta con la primaria concluida y un 9.9 por ciento sin la secundaria.
En esta situación, se encuentra Julián N. de 17 años de edad, quien no terminó la primaria y actualmente se encuentra vendiendo flores en uno de los cruceros más transitados de la capital poblana en un horario de 9 de la mañana a 8 de la noche.
“Desde los 10 años me salí de la escuela y desde entonces me he dedicado a muchas cosas, por ejemplo, de los 11 a los 15 años estuve trabajando en una carpintería donde me pagaban 300 a la semana. (…) El ingreso es muy poco porque nos ven pequeños. (…) Ahora estoy vendiendo flores y me pagan 30 pesos por cada ramo que logre vender. (…) Trabajo porque quiero aportar un poco de dinero a la casa y sacar de trabajar a mi mamá”, acotó.
En el Mercado Zapata se encuentra Antony N. de 11 años, quien comenzó a vender dulces desde los 8 años y percibe un salario neto de 300 pesos a la semana.
“Aún no termino la primaria y lo que me pagan es para comprarme mis propias cosas. (…) Estoy en mi puesto de las 7 a las 9 de la noche. (…) Mi labor es despachar y atender bien a los clientes”, finalizó.
A nivel nacional son dos millones 200 mil menores de edad que se encuentran trabajado, de los cuales el 13.6 por ciento fueron hombres y el 8.4 por ciento mujeres.
PUEBLA CUARTO LUGAR CON MÁS LABORES PELIGROSAS PARA LOS INFANTES.
En el informe realizado por el INEGI se dio a conocer que tan solo el territorio poblano ocupa el cuarto lugar con más menores de edad realizando trabajos en condiciones peligrosas como en un medio insalubre y con horarios prolongados.
Estas problemáticas se presentan principalmente en las actividades agrícolas, ganaderas, forestales, caza, pesca, minería, construcción y en el comercio informal.
Los estados que encabezan la lista son Oaxaca, Chiapas y Michoacán.