"Deprimirnos en la pandemia o innovar para salir adelante, teníamos esas dos opciones, entonces decidimos cambiar de giro y buscar alternativas para mantener vivo nuestro negocio”, fue lo que mencionaron los integrantes de la familia Pérez Castellano, quienes le pusieron una pausa a la impresión textil para hacer caretas que protejan del coronavirus a bebés recién nacidos.
En entrevista con este medio, Anabel Castellano Cortés y su esposo Jorge Pérez Lima, compartieron que ellos tienen un negocio de impresión textil vinil en playeras, gorras y tazas, pero al inicio de la pandemia, sus ventas bajaron considerablemente, incluso hubo un mes completo que no percibieron nada de ingresos.
Como fueron pasando los días, una amiga de ellos que trabaja en el sector salud les pidió que hicieran caretas, ya que aún no se hacían en la ciudad de Puebla, la familia buscó la manera de crearlas y al ser su primera creación decidieron donarlas a este sector.
Tal fue el éxito que más personas los empezaron a buscar para que les hicieran caretas y fue así que decidieron convertirlo en un negocio familiar para hacerle frente a la contingencia sanitaria a raíz del coronavirus. “Comenzamos donando 100 caretas al sector salud y después nos pidieron para hospitales y así empezamos con el negocio. El material que manejamos es un PET calibre 15, no es mica, no es acetato, porque todos estos absorben las basuras y el virus. Nosotros también los hacemos desmontables y fáciles de lavar", explicó Anabel.
Uno de sus primos tiene una clínica de maternidad en la ciudad de Puebla y se le ocurrió que esta familia podría crear caretas para recién nacidos, ya que las mamás primerizas sentían mucha angustia de tener a su bebés en los hospitales y no poderlos proteger ante esta enfermedad.
"Ayudados por el doctor, Alejandro Pérez Lima, que es pediatra, nos dio los perímetros craneales y los materiales que fueran sanos para el bebé, además conseguimos una esponja que no le dañara y un resorte suave. Ahora son de lo más pedidos, ya que en el mercado sólo se estaban enfocando en los niños grandes y adultos, pero olvidaron a los bebés”, agregó Jorge.
Actualmente tienen caretas para recién nacidos, niños, adolescentes y adultos todas las caretas son desmontables y se pueden lavar. El costo varía dependiendo el modelo pero oscilan entre los 30 y 90 pesos. "Gracias a Dios el trabajo ya se está empezando a reactivar y ya estamos teniendo ganancias. Nosotros también ya nos dedicabamos al negocio de las gorras entonces no es un trabajo que desconozcamos", expresaron.
En suma, ya están vendiendo a otras partes del país y se sienten orgullosos de que su producto se esté dando a conocer. Para obtener alguna de estas caretas pueden comunicarse al siguiente número 238 187 7950 o pedir informes en el Facebook de Anabel Castellano Cortés.
“Decidimos reinventarnos y buscar la manera de salir adelante como familia y dentro de la necesidad estamos tratando de dar precios económicos y accesibles al público. Es un negocio 100 por ciento familiar solo estamos nosotros dos, nuestra hija y una sobrina, esperemos poder ayudar”, concluyeron.