Aproximadamente 70 restaurantes del estado de Puebla cerraron definitivamente debido al incremento en el precio del agua, pues las pipas pasaron de tener un costo de 500 a mil 200 pesos durante la pandemia.
Así lo dio a conocer Arturo Delgado Ramírez, presidente de la Asociación Poblana de Restaurantes y Prestadores de Servicios (Apresac), quien precisó que los dueños de dichos establecimientos no pudieron seguir costeando ese servicio debido a las bajas ventas.
En entrevista, informó que los más afectados son los negocios del Centro Histórico, pues el suministro está limitado y, por ende, debían comprar pipas para funcionar a fin de cumplir las medidas sanitarias.
“Cada tres días tenemos que pedir en promedio una pipa de 9 mil litros, pero se termina rápido porque se usa demasiado para la limpieza y el lavado de los productos. Es mucha la inversión, y con el aumento era imposible de cubrir”, puntualizó.
En este sentido, indicó que durante décadas la capital poblana ha tenido problemas de suministro y eso perjudica a los negocios, situación que se complicó más por la emergencia sanitaria que exige a cada uno tener lo indispensable para el aseo de personal y comensales.
Arturo Delgado precisó que, el cierre de los 70 restaurantes provocó el despido de aproximadamente 500 personas, por lo que hizo un llamado a las autoridades para frenar el abuso de los piperos.
En otro tema, el empresario comentó que las ventas entre semana están en un promedio del 20 por ciento, mientras que los fines de semana incrementan a un 30 por ciento.
Ante estas cifras, no descartó que vayan a cerrar más negocios afiliados incluso antes de concluir el presente año, ya que la recuperación económica es a largo plazo.