El Servicio de Administración Tributaria (SAT) pospuso tres meses más la entrada en vigor de la iniciativa que consiste en el uso obligatorio de la facturación 4.0.
A través de un comunicado, la institución precisó que el inicio estaba programado para el 1 de enero del 2023, sin embargo, se extendió para el 31 de marzo, con el fin de que todos los contribuyentes puedan cumplir con los requisitos para expedir de forma eficiente sus comprobantes fiscales.
Se explicó que derivado de la reforma fiscal 2022 todos deben contar con datos obligatorios para la emisión de facturas como RFC, nombre, razón social, código postal y el uso del CFDI.
“En razón a lo anterior y con la finalidad de que los datos que se proporcionen para la emisión del CFDI y aquellos se encuentran en la base de datos del SAT sean coincidentes, aquellos contribuyentes que se encuentren obligados a emitir comprobantes fiscales tendrán la opción de realizarlo en su versión 3.3 hasta el 31 de marzo, a fin de que durante dicho periodo puedan contar con todos los requisitos previstos”, explicó.
Otra razón que orilló a la institución a extender una prórroga fue el tema del Régimen Simplificado de Confianza para personas físicas, donde es indispensable contar con una firma electrónica (e.firma).
Sin embargo, no todos han podido tramitar ese requisito debido a la pandemia por la Covid-19, pues se generó un retraso en las citas en todas las oficinas del SAT.
“Con la finalidad de que los contribuyentes puedan cumplir con la obligación de contar con la e.firma y continuar disfrutando de los beneficios fiscales que ofrece este régimen, el SAT ha otorgado la facilidad de obtener la firma hasta el 31 de marzo”, detalló.
Según el organismo recaudador, las personas tienen hasta finales del primer trimestre del próximo año para tramitar su e.firma, sin que esto implique un incumplimiento a las disposiciones fiscales.